Despertando

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N/a: Es necesario haber leído "Intercambio" para entender mejor esta historia. 

Editado el 25/09/2022

...

Adolorido y aturdido.

Siempre se sentía así luego de la transformación sin importar que tan buena fuera la poción matalobos, sobre todo desde la muerte de Snape ya que no había logrado conseguir una de esa misma calidad y lo resentía.

Fue una sorpresa sentir un colchón suave contra su espalda y sabanas tapándolo, no recordaba haberse arrastrado de vuelta a casa luego de volver a ser humano, pero tal vez se había aparecido y eso explicaba su desnudez.

Se estiró y buscó su varita bajo su almohada, sonriendo al sentirla sin abrir los ojos, disfrutando de la calidez de los rayos del sol y la suavidad de todo lo que lo rodeaba, sintiendo que era un bálsamo para su dolor físico.

Se quedó completamente dormido nuevamente y se despertó horas después sintiéndose hambriento, abrió sus ojos mientras se sentaba sintiéndose algo alarmado al notar que no estaba en su habitación.

Esa parecía... ¡Un cuarto de la Mansión Malfoy! ¿Cómo había aparecido ahí?

No había estado en la mansión Malfoy cuando se transformó, sí, había grandes y hermosos jardines en la propiedad pero Malfoy lo asesinaría si osara preguntar si podía pasar la luna llena ahí.

Tenía que salir lo más rápido posible de ahí y fingir que nada había pasado.

Notó la ropa en el borde de la cama y la agarró, poniéndose la ropa interior y el pantalón, demasiado nervioso y aturdido para notar la presencia de otra persona dormida en la habitación.

Cuando se paró al fin en el suelo agarró con fuerza su varita pensando miles de excusas para decirle al dueño de la casa pero sus pensamientos se detuvieron abruptamente cuando notó la cadena que estaba en el suelo. Parpadeó confundido y notó que estaba unida hacia la pata de la cama y continuaba hasta el frente para luego perderse de vista al caer del otro lado de la cama.

Remus se movió despacio esperando que no fuera un perro que fuera a saltarle al acercarse. Debería solo correr fuera de la habitación pero la curiosidad pudo más que él, pero antes de poder mirar del otro lado de la cama su mano chocó contra la cadena haciéndola temblar y logrando que alguien se moviera del otro lado.

El licántropo se quedó quieto al notar la cabeza rubia que ahora estaba a su vista y se acercó más, hasta que su mirada chocó con los ojos grises que conocía demasiado bien.

Lucius Malfoy lo miraba recién despierto y aun sin volver en sí... y arrodillado en el suelo.

Remus no pudo decir ninguna palabra por varios minutos, abriendo y cerrando su boca al notar que la cadena terminaba en un collar plateado alrededor del cuello del patriarca, pero eso no era lo único extraño: Lucius estaba vestido solamente con una bata casi traslucida que no hacía nada para cubrir su desnudez, sus rodillas rojas y las múltiples marcas que tenía en todo su cuerpo.

— ¿Malfoy?— Se obligó a hablar, preguntándose qué había pasado la noche anterior para acabar así y porque diablos Malfoy no estaba enojado e indignado.

Pero al fin el rubio pareció darse cuenta de la situación y su rostro reflejó el horror que sentía y Remus sintió que eso lo sacaba de su estado de shock.

¡La posición y en la circunstancias que estaban era terribles! ¿¡Cómo diablos habían terminado así!?

Se apuró en acercarse para quitarle el collar, teniendo todas las disculpas al borde de sus labios pero no pudo decir ninguna cuando Lucius Malfoy se tiró a sus pies casi besándolos mientras sollozaba pidiendo perdón.

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