Caos Perfecto

C A P I T U L O 7

- ¿Cuando me dejarás conocerla?- Preguntó Timothy mientras masticaba su hamburguesa.

Estaban en la cafetería del instituto y ,tras ruegos de su mejor amigos, Tanner accedió a hablarle sobre Vanya  para que comprendiera la ausencia que ha tenido.

- No lo sé, por ahora solo papá y yo podemos tener acceso a su habitación, aparte del doctorsito ese.- Escupió lo último con veneno.

- ¿Porqué te cae tan mal? No has parado de quejarte de que ella se ríe mucho con él ¿Será que se conocen?- Preguntó Tim, si había algo que Tanner nunca aceptaría de su amigo era esa velocidad al hablar, es que pareciera que ni siquiera le hiciera falta respirar.

- Hasta donde tengo entendido, trabajó en la casa hogar por un tiempo pero luego se graduó y consiguió trabajo en la clínica.- Explicó con fastidio.

- En fin, ¿Cómo es ella?

- ¿Porqué te interesa?- Preguntó el chico con molestia.

- ¡Oh vamos, Tanner! Solo tengo curiosidad.- Lloriqueó provocando que Towers girará los ojos.

- Es divertida y ocurrente.- Dijo para dar un sorbo de su bebida.- Para mi sorpresa, aprende muy rápido.

- Entonces si está bien con todo lo de la lectura.

- Si, se esfuerza.- Contestó con modestia.- Pues con este maestro tan maravilloso que tiene ¿Cómo no aprovecharlo?- Sus palabras hicieron a Tim rotar los ojos, su mejor amigo nunca cambiará.

- ¿Qué edad tiene?

- En una semana y dos días cumple los 18.

- ¡Oh, como nosotros!- Dijo con Sorpresa.- ¿Qué pasará con ella una vez que le den el alta?

Esa pregunta nunca se había posado en la cabeza de Tanner pero era muy útil. ¿Qué será de Vanya al salir de ese lugar? Ya será mayor de edad y no deberá regresar a la casa hogar... Tendría que preguntarle a su padre el destino de esa chica.

- No tengo idea - Contestó pensativo.

- ¿Cuánto tiempo llevas visitándola?

- Deja de hacerme preguntas sobre alguien que no soy yo.- Espetó el chico mientras el timbre comenzó a sonar.- Ya vámonos.- Se pusieron de pie para caminar hasta su próxima clase.

- Hermano, ¿Qué pasó con Vanessa?- Preguntó por curiosidad Tim.

- Pues nada, se fue y yo no iré con ella porque mi vida aquí es maravillosa.- Contestó con simpleza.

No pudo evitar recordar aquella chica morena, con clase y elegancia, con la que mantuvo relación amorosa por tantos años. Desde pequeños sus padres, los cuales son amigos, quisieron verlos juntos y por un instante se cumplió. Pero todo cambió en cuanto la chica decidió que quería irse del país y él no quiso irse con ella. Desde entonces, no han vuelto a dirigirse la palabra.

- Iré a tu casa hoy y así la Sr. Emily me preparará algunas galletas tan deliciosas.- Dijo Timothy cambiando de tema drásticamente y haciendo a su amigo girar los ojos.

***

- ¿Trajiste sushi?- Preguntó Vanya revisando una de las tres bolsas de comida que su acompañante le había llevado está vez.

- Si.- Contestó con simpleza tomando asiento junto a la camilla de la chica de rastas.

- No me gusta el sushi.- Dijo ella como si de una niña pequeña de tratase.

- Nunca lo has probado.- Contraatacó él.- Vamos, toma los palillos y te explicaré cómo...- De vio interrumpido por la chica que introdujo una rodaja en su boca con las manos.- ¡Por Dios, Vanya! No hagas eso, usa los palillos.