Historias y más historias...
Lo único que conoce son esos cuatro pisos, el comedor y su cocina, algunos dormitorios y nada mas, nunca ha salido a las calles, cree que son peligrosas y que llevan a cometer pecados y ¿Cómo no pensar eso, si es lo único que ha visto en sus cortos diez años de edad? No sabe aún que esta bien y que esta mal, no los diferencia, no los reconoce.
Sabe que compartir con las niñas de su habitación esta bien y también sabe que es malo desobedecer a los mayores, a las señoras de la casa y al padre que habita ahí.
Pero todo cambia cuando traen a una nueva niña, un poco más grande que Autunm, tal vez en sus doce o trece, le dicen que su nombre es Alisa y que le debe tener paciencia, al parecer perdió algo llamado padres.
¿Padres? ¿Qué son Padres y por qué ella se ve tan triste?
Debe ser algo importante, ya que llora mucho.
No cree que sea bueno que alguien se vea tan solo así que decide que va a ser su nueva amiga, primero trata de llamar su atención con regalos de comida, ya que eso es lo que le gusta a Autunm más que nada y cree que eso la alegrará un poco, no funciona, Alisa sigue llorando y sigue llorando desconsoladamente.
Una semana después vuelve a intentarlo, esta vez sólo se sienta a su lado, sin decir nada. Justo en ese momento Autunm comprende que no necesitaba regalos ni nada de eso, entiende que Alisa se siente un poco mejor con sólo tenerla ahí, así que junta sus manos y las entrelaza, Alisa la mira asustada, nadie la había vuelto a tocar desde que llegó y le sorprendió que Autunm se interesara en ella, pero no dijo nada, sólo le sonrió y le dio un apretón suave.
Desde ahí fueron inseparables, para donde iba una estaba la otra, no se despegan ni un segundo, Alisa cada vez se sentía más segura y no lloraba tanto, sólo en las noches cuando recordaba a su familia, Autunm sólo se acostaba y la abrazaba hasta que se quedaban dormidas una junto a la otra.
Alisa le enseñó muchas cosas a Autunm, como que era los padres y que se podía reír hasta llorar, juntas eran como una bomba a punto de explotar, siempre riéndose y haciendo travesuras, corriendo de aquí a allá, sin temor a nada, sólo niñas y ya.
Tiempo después cuando ya tenían catorce y dieseis respectivamente, fueron convocadas por el Padre, algo extraño, ya que las más pequeñas eran las que tenían clases con él y casi no se le veía, sólo en las cenas y siempre estaba acompañado por las señoras de la casa. Cuando acudieron a la tan ansiada reunión o clase, fueron separadas, Autunm fue primero con el Padre y sucedió algo extraño.
Él empezó dándole besos cerca de la boca, por el cuello y mejillas, Autunm no sabía que pasaba, sólo se sentía muy muy incómoda, el padre no paraba seguía abrazándola y dándole besos babosos, a Autunm le dio asco, de sí misma y del Padre, nunca había experimentado eso contra una persona, no sabía qué hacer, así que cerró los ojos e imagino que estaba en otro sitio, junto Alisa, las dos riendo y jugando, como siempre, como debió ser.
Cuando Autunm salió, le dieron ganas de llorar, ya que su amiga estaba llorando y gritaba, estaba entre sorprendida y preocupada, no sabía que le habían hecho para que se pusiera así, estaba Alisa tan alterada que le aplicaron una inyección que la puso a dormir inmediatamente, fue transportada por un par de las señoras de la casa y la dejaron en la cama.
Cuando Alisa despertó, sintió como si estuviera vacía por dentro, sin sentido, veía todo gris y se sentía sucia, no entendía como Autunm no entendía que les habían hecho, eso fue algo que Diana, la mamá de Alisa le había explicado desde niña "nunca dejes que nadie te toque tus partecitas ni que te bese en la boca, no está bien, si pasa, grita lo más que pueda y corre a decirme, cariño". Cuando le explicó a Autunm que eso estaba mal, ella no entendía, sólo lo veía como algo incómodo y que le fue doloroso, algo que no quería que volviera a pasar, así que trató de entender lo que le explicó Alisa.
Fueron llamadas de nuevo, Autunm temblaba del miedo y Alisa estaba en silencio. Cuando iban a ser separadas Alisa grito y Autunm la acompañó, ambas gritaron y forcejearon, buscando la salida urgentemente, tanto fue el escándalo que fueron llevadas de vuelta a sus habitaciones, pero antes de eso Alisa le gritó al Padre, eso fue algo que Autunm no olvidó "Usted es un atrevido y asqueroso, le vamos a decir a todo el mundo, pagará por lo que nos hizo". Al parecer al Padre tampoco fue capaz de olvidarlo, ya que Alisa a la tarde siguiente fue llamada y no volvió, dieron las diez de la noche y no aparecía, nadie sabía nada de ella, a la mañana siguiente fue igual, y a la siguiente, y a la siguiente, pasaron así cuatro días, sin saber nada de Alisa, Autunm esperaba que hubiera sido adoptada y no fuera algo malo, al final de la semana, la dieron por muerta y/o desaparecida, ya a nadie le importaba, una niña más una niña menos ¿qué más daba? Podían recibir otra mejor.
Autunm nunca olvidó, nunca perdonó, se volvió más callada, menos alegre y no le agradaba la compañía de nadie, menos del Padre, que sólo la mandaba a buscar una vez a la semana y Autunm sólo cerraba los ojo e imaginaba que Alisa volvía y que juntas escapaban de aquella casa, pero no, nunca pasó, sólo después de unos seis meses una pareja llegó a la casa, que buscaban una niña grande, querían ofrecerle una mejor vida, inmediatamente se fijaron en Autunm, era su prototipo de hija, amable y callada, la pareja la visitaba a menudo, tanta fue la confianza que le ofrecieron que se fuera con ellos, a su hogar y que fuera su hija, Autunm aceptó, no soportaba otro día más en aquella casa.
Ya en la salida, pasaron por la zona de los bebés, quedaban unos dos o tres, ya que eran los primeros que se iban, Cristina, la esposa de don José se quedó un largo rato mirando a uno en especial, era probablemente el más grande de esa zona, debía tener unos tres o cuatro como mínimo, era rubio y un poco gordo. Cristina volteo a mirar a don José con una sonrisa y él sólo asintió, ella lanzó un grito y fue por el bebé, ella miró a Autunm y se lo presentó "Se llama Noah ¿no es muy lindo? Será tu nuevo hermanito linda". Al final se fueron los cuatro a casa y Autunm no volvió a saber nada de aquella casa, sólo lloraba en las noches, cuando pensaba en Alisa e imaginaba que estaba bien.
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Los secretos de Autunm
AdventureAutunm es probablemente la mejor e impactante persona que conocerás, es tan interesante que toda su personalidad te envuelve, te atrapa y no te deja ir a menos que ella lo desee. Pero tiene un problema, todo es una farsa, ella no es así, nunca lo h...