Pokémon, Profecía de Fuego

Capítulo 12: ¿Quién eres tú?

Aún era de noche. Mientras caminábamos de vuelta al valle siguiendo un camino por el río, mi mente estaba llena de preguntas y dudas, miedos y conflictos mientras seguía mirando el guardapelo: ¿mis padres eran científicos en ese laboratorio? ¿realmente eran tan ambiciosos para haberle robado al jefe de esa organización? Pero las más importantes eran, ¿trabajaban lastimando a los Pokemon, con quienes yo había vivido toda mi vida? ¿y si soy tan malo como ellos?

"Alex, ¿te encuentras bien?" me dijo Ember mientras caminábamos. Todos los demás también se detuvieron

"No..." dije, "Amigos... tengo que decirles algo"

Procedí a contarles la historia de cómo había sido abandonado, salvado por mi madre Charizard y transformado por el legendario Ho-oh. Sin embargo, tuve que mostrarles el guardapelo y decirles sobre lo que había visto y escuchado por parte de ese hombre.

"Vaya, parece una historia muy complicada" dijo Zach, "nunca me imaginé que antes eras humano"

"Ni yo que fueras transformado por el legendario Ho-oh" dijo Sky, "es un ave legendaria muy conocida por los míos"

"Ustedes recién llegaron hace poco" dijo Flora, "Alex nos lo contó cuando éramos niños"

"Lo que más me extraña es lo que ese hombre te dijo" comentó Dash, "¿realmente eres hijo de unos científicos de ese lugar?

"No" defendió Ember, "No puede ser, Alex es bueno no malo como ellos"

"Gracias por apoyarme Ember" le dije, "Pero no sé qué decir debido a eso. Seguramente será mejor que me vaya del valle"

"¡¿Qué?!" dijeron todos al unísono.

"No puedes irte" dijo Dash, "Eres nuestro mejor amigo"

"También el mío" dijo Zach, "No nos conocemos desde hace mucho, pero me salvaste de una vida controlado"

"A mí también" dijo Sky, "Si fueras tan malo como los científicos que nos hicieron sufrir allí, lo sabría, pero no eres como ellos"

"Por favor, Alex" dijo Flora, "Tus padres te necesitan"

"Flora, te recuerdo que no soy su verdadero hijo" le dije.

"¡Pues a mí no me importa!" dijo Ember, "¡No me importa si eres hijo de esos científicos, eres alguien muy importante para mí!"

"Ember..."

Me sentí destrozado por esas palabras. A mí también me importaba Ember, fue por eso que la liberé a ella en el furgón. Pero, ¿cómo podría ser lo nuestro si no soy más que el hijo de dos personas insensibles que buscaban poder?

"¿Quién eres tú?" preguntó una voz a mis espaldas.

Todos nos giramos para ver quién era: un Noctowl estaba posado en un árbol, nos miraba con forma curiosa a todos. Flora se dispuso a saludarle, siempre fue la más simpática de todos.

"Hola" se presentó Flora, "Me llamo Flora, todos somos amigos: Dash, Sky, Zach, Ember y Alex"

"Mucho gusto" dijo el Pokemon, "Pero mi pregunta es para Alex"

El Noctowl volvió a centrar la mirada sobre mí.

"Dime, ¿quién eres?"

"¿No lo dijiste tú mismo?" le respondí sin entender, "Me llamo Alex"

"No te pregunté tu nombre. Sino quién realmente eres"

"Esto... yo..." empecé, pero luego me detuve: estaba con una crisis de identidad, no sabía quién realmente era.

"No soy nadie..." dije sin más respuestas. Todos me miraban como si vieran a un bicho raro.

"Alex..." dijo Ember.

"Nadie es nadie" dijo el Noctowl.

"Tal vez, pero en estos momentos ya no sé quién soy" respondí.

"Si quieres saber quién eres. Solo mira hacia la mitad del río" dijo el Pokemon.

Todos nos giramos para ver a qué se refería. Caminamos un poco más, apartando la maleza que crecía por allí. Luego de hacerlo, nuestros ojos se encontraron con una pequeña cabaña a la orilla del río. Mi mente entró en una especie de recuerdos al verla.

"Esa... era..."

"La cabaña donde te encontró Agni" dijo el Noctowl, "Las respuestas que buscas están allí, pero debes entrar solo"

"Pero..." empezó Flora.

"Amigos, creo que el señor Noctowl tiene razón" interrumpió Zach, "Es la búsqueda de Alex, y debe encontrar la respuesta él mismo"

"Bueno" dijo Dash tendiéndome su mano, a lo que le devolví la mano "Buena suerte compañero"

"Ánimo compañero" dijo Sky.

"Te estaremos esperando cuando salgas" dijo Flora.

"Por favor, no te vayas si no encuentras lo que buscas" dijo Ember.

"Eso dependerá de lo que encuentre, Ember" le dije. Y dejando a mis amigos atrás, me puse a caminar hacia la cabaña.

Mis amigos me miraban con esperanza, como si lo que encontraría allí me daría la clave para reconocer quién o qué soy en realidad. La noche estaba tan silenciosa que ni el Noctowl o algún otro búho hacía el menor ruido, y eso que ellos son diurnos. La cabaña parecía más tétrica mientras más me acercaba a la puerta. Se podía notar los ataques que recibió aún en las paredes, tal como mis padres me habían contado. Mientras pensaba en qué encontraría, ya había llegado hacia la puerta.

La puerta estabacolgando de un solo lado, por lo que se cayó apenas puse una mano para moverla.Dentro estaba bastante oscuro y olía a moho y polvo.