🍁

575 20 5
                                    

(...)

Era una mañana muy fría en Japón pero aún asi las clases estaban comenzado y una nueva semana daría comienso.

Aunque la mañana era fría no lo era para la clase 3E que estaba subiendo la colina que los encaminaba a su salón.

Pero un gran sentimiento de preocupación abrumaba a la gran mayoría esto se debía a que la noche anterior dos de sus compañeros no habían dado señales de vida esos dos eran Karma y Nagisa.

El par de hermanos se habían quedado para hacer la limpieza de el aula...no se supo nada más de ellos ni sus parejas sabían donde estaban y eso aumentaba la preocupación y la imaginación de algunos volaba.

- Profesor karasuma a sabido algo de Nagisa o de karma, Nagisa ayer quedó en llamarme para acabar de acordar la fecha del proyecto de ciencias pero nunca recibí su llamada usted sabe si le paso algo -pregunto con un tono de preocupación Yada.

- Lo mismo digo, siempre son los primero es llegar pero se han tardado muchacho ¿No? -agrego Okuda preocupada.

El peli negro se perdió en sus pensamientos analizando las palabras que acababa de escuchar.

-...Tienen razón ayer no supe nada de Nagisa eso me tiene inquieto -respondió tratando de tragarse la preocupación que lo consumía por dentro.

El aroma de los omegas paso de una calmada a una de preocupación y de miedo.

Nadie sabía nada de los muchachos, continuaron su camino subiendo la colina algunos hablando y otros en silencio o abrazados a sus alfas.

Algo llamo la atención a Terasaka una pequeña luz entre el césped verde hizo que su sentidos se activarán a más no poder se separó de Itona con cuidado y se acerco separandose del grupo, a su omega se le hizo raro que también se acercó para poder observar quedaron petrificados cuando lograron distinguir un cuchillo enorme cubierto de sangre seca.

- Vengan todos miren lo que acabo de encontrar aquí! -dijo en voz alta llamando la atención del grupo.

Todos se acercaron con curiosidad para saber que es lo que había encontrado el bicolor.

Al igual que el todos quedaron asombrados ya que aunque ellos fueran asesinos y trabajarán con armas jamás lastimarian a un ser humano.

- Que hace algo como esto en la malesa -dijo para si mismo el delegado de la clase 3-E.

- No lo sé...y Sí esto tiene algo que ver con que no sepamos de Karma y Nagisa...No me da ninguna buena sensación -dijo Itona inquietando aún más a los presentes.

- Itona no digas algo como eso... lo mejor es mantener la calma, debe haber alguna explicación para todo esto -dejo mar de tratando de bajar la preocupación de toda su clase.

La mayoría ya estaban asustados tomando la desicion de subir la velocidad a su caminata hasta estar cerca de su aula.

La imprevista llegada de Koro-sensei los hiso detener su andar.

- Buenos días clase ¿Porqué esas caras?...parece que hubiesen visto un fantasma, hoy será un gran día arriba esos animos -dijo el gran profesor intentado mejorar la actitud de su clase- alguien a sabido algo de mis hijos aller no llegaron y jamás respondieron sus celulares -agrego con curiosidad.

- Buenos días koro-sensei la verdad es que estamos asustados Karma y Nagisa no aparecen y pensábamos que estaban con usted y encontramos un cuchillo con sangre...algo no esta bien -dijo Okuda con mucha más preocupación que antes.

- Tranquilos después veremos eso del cuchillo, los chicos deben estar ya adentro, sigamos caminado en unos segundos ya comienzan las clases - dijo el pulpo incentivando a la clase a continuar.

Esa repuesta lo único que consiguió es que Karasuma se preocupar más y tuviera muchas más ganas de asegurarse que su Omega estába bien.

Toda la clase comenzó a caminar pero aún todos sentían que algo no está bien...algo malo paso y eso esta poniéndoles la mente de cabeza.

Al llegar todos quedaron horrorizados de la escena que acababan de encontrar...era espantoso, una escena horrible.

Había sangre y mucha...en el suelo un gran charco como si a alguien se hubiera arrastrado para salvar su vida.

El primero en entrar fue Koro-sensei quedando hororrisado a más no poder por la esena que estaba presenciando.

Sus dos hijos omegas, sus niños estaban muertos, karma había sido
golpeado a más no poder estaba arimado contra la pared de una manera muy brusca pareciera como si lo hubieran lanzado desde una distancia muy larga.

Nagisa su hijo menor se encontraba en el suelo en el medio de el aula con un charco de sangre en su cabeza su ropa desgarrada con el completamente mutilado lleno de eridas y golpes.

Se bloqueó por completo...su mente se nublo lo que hizo que volviera a la realidad fueron los gritos de sus estudiantes asustados al ver tal escena.

Vio como karasuma se acercaba al cadáver de su hijo menor abrasandolo desesperadamente tratando de despertarlo lloraba intentando sacar esa horrible imagen de su cabeza.

La cordura de karasuma se rompía más a cada momento que besaba cada parte del rostro del pálido rostro del muchacho haciendo el intento traerlo del sueño que jamás volvería.

Irina tomó su teléfono pidiendo ayuda lo más rápido posible al igual que trataban de calmar a su pequeña omega que lloraba de manera frenética.

Los más fuertes trataban de calmar la histeria que la escena había provocado.

No era un buen día....había sido el peor y uno que deseaban olvidar en todo lo que la quedaba de vida...esas horribles imágenes serían lo último que querían ver en el mundo.

𝕃𝕒 ℕ𝕠𝕔𝕙𝕖 𝕖𝕟 𝕝𝕒 𝕢𝕦𝕖 𝕥𝕠𝕕𝕠 𝕔𝕒𝕞𝕓𝕚𝕠 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora