The Balkan

Capítulo 6 | Bienvenida a The Balkan

— Cálmate, hermana. Lo está haciendo tan rápido como puede

— ¡Ya pasaron tres días!

— Julia, hackear el servidor de una universidad no es cosa de niños. Tienes que ser paciente.

— Sé que la paciencia no es tu fuerte, pero, por favor, intenta relajarte.

— No hay manera de que me relaje.

— Al menos inténtalo. Te llamo pronto. El tipo dice que ya casi lo logra.

—Gracias. Lamento actuar como una idiota. Agradezco tu ayuda.

—No te apures. No se puede ser guapa y tener una gran personalidad; algo tenía que tocarme a mí.

—Llámame tan pronto sepas…

—Sí. Adiós.

¿Relajarme?

¿Katya cree que debería relajarme?

Sólo hay dos cosas en este mundo que me ayudarían a relajarme, y desde que Elena me sacó de su vida hace
tres días sólo he podido hacer una de ellas: ejercitarme como loca.

Pero sigo enganchadísima.

No puedo sacármela de la cabeza.

No entiendo qué hice para asustarla de esa forma, excepto mostrarle que soy una auténtica idiota.

Ahora que lo pienso, quizá fue eso.

Pero ella ya sabía cómo soy desde antes de enviarme ese primer correo.

Entonces, ¿qué cambió? ¿Qué hice? Imaginarla alarmada y queriendo huir de mí a como dé lugar me está matando.

Un minuto se está tocando y gimiendo mi nombre, y al siguiente corta toda comunicación.

Debo encontrarla y reafirmarle que no tiene nada que temer, que no deseo hacerle ningún daño.

Estoy sentada en la cocina vestida apenas con un par de jeans, en brasier, y con las manos en la cabeza.

Debería estar trabajando.

Estamos planeando otra gran adquisición y hay mucho por hacer.

Katya ha estado cubriéndome, pero no puede hacer todo desde San Peter en este caso en particular.

Debería estar en la oficina, dirigiendo a mis modelos y a mi equipo.

Pero no logro concentrarme.

No hago otra cosa que mirar la jodida  pantalla del teléfono, esperando que Katya me llame para decirme que ya la encontró.

He intentado enviarle un par de correos más, con la esperanza de que
hubiera reconsiderado las cosas y hubiera reactivado la cuenta.

Pero no tuve suerte.

Ambas veces recibí la misma aburrida notificación de error.

Abro la laptop y entro a mi correo una vez más, por si acaso.

Hay un correo de The Balkan, es de ayer en la tarde.

Estimada señora Volkova:

¡Bienvenida a The Balkan!

El motivo del correo es notificarle que hemos recibido con éxito la transferencia del costo de su membresía.

Oficialmente es socio de The Balkan.

Mañana recibirá un paquete de bienvenida a la dirección que proporcionó en su solicitud, en el cual encontrará todo lo necesario para aprovechar al máximo su membresía.