La tarde transcurría normalmente, estaba terminando de hacer mis deberes de la universidad para ayudar a hacer los quehaceres con mi madre, mi padre no había llegado aún de su trabajo lo cual era raro ya que él llegaba a un cuarto pasada las siete y eran ya las siete y treinta pos meridiano, como sea después de terminar mis tareas ayude a preparar la cena a mi madre lo cual no era necesario porque ella es una gran chef y esa noche hizo pizza solo por complacerme a mí, cuando terminamos en la cocina llega una de sus amigas de visita y con ella mi mejor amiga, ella es loca, única, divertida y tiene casi los mismos intereses que yo por eso será que nos llevamos tan bien, es la única que sabe todos mis secretos pero como sea eso no viene al caso, mientras mi madre charla con su amiga, mi mejor amiga y yo vamos a una pequeña colina que hay detrás de mi casa donde se ven todas las constelaciones del hemisferio norte como: la osa mayor y menor, orión y el cisne. En fin cuando llegamos a la colina nos pareció raro que no se viera la osa mayor ya que siempre es visible, nos recostamos pero empezamos a darnos cuenta que las estrellas desaparecían una a una y al voltear a ver a mi amiga me di cuenta que ella lloraba y cuando le quise preguntar qué pasaba, solo dijo que se tenía que ir y salió corriendo en dirección a mi hogar yo la empecé a perseguir pero al llegar a mi casa me di cuenta que ya no estaban ni mi mejor amiga ni la amiga de mi madre cuando me quise acercar a mi madre para contarle lo que paso con mi amiga desde que fuimos a la colina, mis pasos se volvieron pesados, como si mis zapatos estuvieran hechos de osmio y cuando pude acercarme a ella para relatar lo sucedido me empezó a fallar la voz hasta quedar afónico cuando no pude hablar noté la cara de mi madre que no era para nada normal parecía como si le hubieran moldeado la expresión de horror en su tez, me pasó papel y lápiz para que terminara de relatar de manera escrita lo que había ocurrido pero cuando termine de escribir hubo una enorme falla eléctrica dejando la casa en una oscura penumbra y a su vez se desato una estrepitosa lluvia que en menos de un minuto ya tenía inundado mi hogar, viendo todo eso empecé a entrar en estado de shock y deje de respirar cuando reaccione estaba sumergido y tragando agua, cuando pensé morir, fue cuando logre despertar de ese perturbador sueño que aun después de un mes no he logrado olvidar y que todavía siento en mi piel , para mí todo eso fue real y lo sigue siendo y aún vivo con esa sensación de que ese sueño fue una señal que algo malo va a pasar.