ANGEL CAIDO (COUNTRYHUMANS X LECTORA)

CAPITULO 3

~LA JUNTA 2~

En la sala de juntas aún permanecía China, Alemania, España, Inglaterra, Francia, Japón, URSS, NAZI, USA, Canadá, Rusia y la gran mayoría de los latinos.

Aunque los de ascendencia asiática se despidieron para irse pocos minutos después, Inglaterra estaba platicando con USA, Canadá y Francia sobre quién sabe que, la plática duró a lo mucho 15 minutos más, después Francia y UK salieron del lugar.

URSS: 201, que gusto verte y que gusto volver a ver a los hermanos latinos, ¿Cómo han estado? (todos los latinos contestaron con un simple ademán y URSS entendió con ello que estaban bien)
NAZI: Méx que grosero que ya no te tomes la molestia de saludar

Evidentemente los novios de México se quedaron un poco más confundidos de lo que estaban ayer, esperaban que todo lo que sucedió por la noche se aclarara al final de la junta, pero terminaron con más dudas, ¿Porque URSS llamó a México 201?, los demás latinos, España e inclusive Alemania no parecían en absoluto confundidos, todo lo contrario parecía que ya estaban familiarizados con el ¿Apodó?, Sin embargo, los presentes sabían que tanto la relación de 4 como las dos representaciones rivales de la segunda guerra mundial tenían cosas de que hablar.

España: bueno, nosotros ya nos vamos llendo, avisen por favor cuando estén de camino a la casa
México: sí, les mandaré mensaje, de cualquier manera no tardaremos demasiado en ir, se aproxima una tormenta después de todo, vayan con cuidado

Una vez que los demás presentes ya habían salido de la sala de juntas, URSS y NAZI parados delante de México, abrieron los brazos esperando evidentemente un abrazo, Méx sin más se levantó y se abalanzó hacia ambos para darles un abrazo, que separaron en poco tiempo, los otros tres pensaron lo mismo, ¿Entonces si se conocían no?, ¿De dónde?, ¿Porqué?, ¿Cuando?, ¿ONU se molestaría si en la próxima reunión traía su vodka con él?

Y un par de minutos después, se encontraban los 6 en una cafetería, en una plaza ubicada en el centro de Moscú, era muy útil que casi no había nadie de gente claro todos estarían en sus casas esperando a que termine de pasar la tormenta para salir de nuevo y además estaba bastante silencioso así que era muy cómodo.

Rusia: ¿No hay algo de lo que quieran hablarnos?
URSS: ¿Mhm?, ¿Sucede algo?
México: sí, bueno, tal vez está conversación sea por mi culpa, en realidad no les eh contado nada, ya sabes de "eso", aún así ya han paso mucho años
NAZI: ¿Cómo que no les has contado nada?, ¿Cuándo pensabas hacerlo?, Ya te había dicho que no te guardarás las cosas así, además ustedes 4 están en una puta relación, tu nunca cuentas  nada ¿No?
México: ¿¡Eh!?, Eso no es verdad, pero bueno, ya dejen el tema ese a un lado, les contaré cuando hayamos  llegado a casa y tengamos más privacidad, ah y lo que dijo Third no es verdad, no le hagan caso ta' pendejo
USA: ¿okay?
México: mejor digan, ¿que opinan de lo que dijo ONU?, ya saben lo del nuevo country
Canadá: debemos estar atentos, después de todo está en Moscú, pero espero que no sea muy complicado con todo lo de la tormenta, me preocupa que llegue a estar sólo por ahí, es solo un pequeño país
NAZI: en eso tienes razón, es un mocoso de ¿12 años?, Pero ¿Por qué mierda estaría sólo en Moscú?

EN OTRO LADO DE RUSIA

NARRAS TU:

Apenas voy llegando al centro de Moscú, debí de tomar un taxi o algo, ¿Aquí habrá camiones?, tarde mucho menos de lo que esperaba si, llegué y aún no anochece, pero eso no quita que camine un montón, estoy en una ¿Plaza?, ok si, si está bonita y todo, pero estoy cansada y hambrienta, sin pensarlo mucho entré a la primer cafetería que apareció delante de mí, una cafetería con una fachada muy elegante, pintada de negro con letras rusas manuscritas en dorado y algunas flores, el local estaba casi vacío solo estaban ocupadas tres mesas, aún así me fui a sentar a la más alejada de todas las personas que estaban ahí, aunque el lugar era pequeño y podía ver a todos perfectamente bien, sentarme aquí en una esquina del lugar, marca una distancia con los demás, aunque no le puse atención a nadie al entrar, Porque como que a mí que me importa, ¿no?.