1. Desesperanza en la tragedia

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Era una noche de llovizna en Lima, Kaled, un chico delgado caminaba por la oscuridad de ese día, regresando a su departamento. Caminando por unas calles de Pueblo Libre, sin darse cuenta se metió a unas sin alumbrado público.

 Rayos, debo dejar de hundirme en mis pensamientos y fijarme por donde camino. Estás calles son peligrosas a estas horas, debería apurarme.

Empezó a caminar más de prisa cuando de pronto voltea a la derecha en dirección a la avenida y logra ver a una chica delgada y bajita. Al pasar ella, seguidamente ve una pandilla de pirañas con una actitud rara y queda pensando.

 No me digas que... no puede ser... esto pinta mal, creo que sería malo si camino a la siguiente cuadra.

Empieza a trotar cuando de pronto llega a la esquina y ve que la chica dobló en dirección a la zona oscura que estaba él, pero estaba caminando rápido y trasmitía miedo. Sin esperarse los pirañas empiezan a correr y entre risas la alcanzan y la tumban al suelo. Seguidamente la rodean en la esquina le empiezan a quitar lo que tenía. Kaled al ver, decide apresurar el paso, sin embargo, uno de ellos estaba parado en la esquina vigilando con un arma en la mano derecha. Él al verla, le entra un poco de miedo.
Tras pasar unos segundos, escucha gritos, alza la mirada y ve que estos estaban acosándola sexualmente. Kaled se queda totalmente impotente, y sin importarle nada decide ir.

 Malditos hijos de... ¡¡¡mientras esté yo esto no pasará!!!
Corriendo llega al de la pistola y le da un golpe en la sien dejándolo inconsciente al instante y tira el arma. Kaled la toma y con eso empieza a golpear a los otros y se percatan y queda una pelea 5 a 1.
 Miren, llegó un salvador. JAJAJA, ¿crees que nos vas a ganar? ¡Ja! Somos más, si quieres vivir suelta el arma, solo te golpearemos.
 Creen que me voy a inmutar, ya me cansé de ustedes. Desearán morirse por el dolor. Jejejeje...

Al terminar Kaled con el arma golpeó en la cabeza al más grande y musculoso dejándolo en el suelo sangrando, termina tirando el arma encima de él. Y se pone en posición para pelear con los otro mano a mano. Así empieza una pelea de golpes intensa, la chica con sus prendas abiertas se queda perpleja y se tapa el rostro. Kaled dando golpes rápidos sin dejar que lo golpeen y esquivando todo le iba bien hasta que uno que tenía un cuchillo corre velozmente y se lo clava en el abdomen.
Kaled con un rostro de dolor escupe sangre y empieza a sangrar. Rápidamente se quita el polo y lo hace una tira y hace presión en la herida. Al terminar, sin polo y con este lleno de sangre vuelve a ponerse en posición.

 ¿Eso es todo lo que tienen? Eso no es nada, ustedes ya están muy cansados, recurrieron a eso pensando que ganarían, pero... en una batalla de estrategia no pierdo. -dice mientras que por dentro se aguantaba el dolor y concentración para no decaer.

Y así, siguió y siguió hasta que todos caen al suelo extremadamente golpeados y ensangrentados. Las luces volviendo a parpadear logra verse la sombre de todos en el duelo y la de Kaled parado. Al terminar volteó donde la chica y se le acerca poniéndose en cuclillas.

 ¿Estás bien? Creo que tienes torcido el tobillo, ¿verdad? -le dice con una voz dulce y amable dándole a entender que ya está a salvo.
 Si... muchas gracias.
 No te preocupes, creo que esto es tuyo. -le dice entregándole sus cosas que había sacado de las manos de los delincuentes- Si no es molestia puedo llevarte a mi departamento para atender tus heridas y si quieres tomas una ducha.
 ¿Qué?... -responde la chica avergonzada y con temor.
 Está bien, está bien, si sientes miedo no te preocupes, puedo llamar a una ambulancia. Aunque se armaría un escándalo y no sabría explicar todo esto.
 Entonces... mejor llévame a tu departamento, no creo que te hayas arriesgado tanto solo para querer aprovecharte.
 Okay, ven, sube a mi espalda, no puedes caminar y será más rápido así.
 Está bien... -dice avergonzada y acomodándose la ropa.
Kaled se da media vuelta, se prepara y la carga. Al pararse, ella se enrolla con sus piernas alrededor de él y se apega.
 Fuck... no pensé que sería tan vergonzoso, está en short y siento sus... contra mi espalda. -piensa Kaled empezando a caminar.
 N-no puede ser... ¿por qué está sin polo? Puedo sentir su piel y mis piernas con lo demás. No pensé que fuera tan difícil. -piensa la chica sonrojada.
 Bueno... esto... no demoraremos, son solo unas 10 cuadras. -inicia una conversación Kaled para alivianar la tensión del ambiente.
 Ya, está bien. -responde de inmediato y algo nerviosa- Espera... ¿por qué siento algo mojado en mis piernas?
 ¡NO PUEDE SER! ¡AHHHH! ¡Mierda! La herida, ha movido un poco el polo y ha aumentado la velocidad del sangrado, debo haber perdido unos 300 mililitros, debo resistir hasta que lleguemos. -piensa y grita en su cabeza soportando el dolor.

Finding the love without wantDonde viven las historias. Descúbrelo ahora