|| OBSESIÓN || YM

𝟕

- Seok Jin te llevara a tu nuevo alojamiento dónde estarás con YoonGi - dijo Namjoon apuntando al chico de cabello rosado pastel que estaba a un costado de la puerta principal de la oficina.

-¿Que tal? Yo soy Jin - presentándose ante Jimin.

- el lugar está vigilado las 24 horas, ya que es unos de mis cuarteles de droga, así que no debes preocuparte por la seguridad -

- muchas gracias amigo -

- en el lugar van a entrar y salir diferentes personas, pero el que está a cargo de todo es Seok Jin, así que ante cualquier duda, ve con él -

YoonGi despertó en una habitación completamente diferente a la que el estaba.

- ¿Qué? - dijo YoonGi mirando sus manos.

Ya no estaba en esa casa que tanto detestaba, miró hacia todos lados, y no había nadie, la habitación estaba vacía.
Buscó una ventana para escaparse, era su única oportunidad.

- Es algo tonto escapar por la ventana, Min - dijo Jimin apoyado en el marco de la puerta.

- joder - pensó el mayor.

- veo que te haz dado cuenta de que ya no estamos en mi casa - se acercó a Yoongi para abrazarlo por el cuello. - es que el estúpido de shi hyuk me delató, y ahora la policía me está buscando, pero aquí ya estamos a salvo - miró al mayor a los ojos.

YoonGi se separó de Jimin de un empujón.

- oye, oye, tranquilo - el rubio se acercó al de cabello oscuro. - estás bajo cuidado de muchos señores con armas - hizo puchero. - y si intentas escapar, no querrás que esos señores malos te maten ¿O sí? - sonrió.

- prefiero que me maten, a estár secuestrado aquí, contigo - lo miró de arriba a abajo.

- ¿Por que eres tan grosero? - le dio una suave palmada en la nuca.

Jimin tomó a Yoongi del mentón y comenzó a besarlo con ímpetu.

- ahora que nadie nos va a molestar, voy a tenerte para mí, las veces que quiera - el rubio sonrió y se mordió el labio inferior.

- ahora no voy a parar Min - lo romó del mentón con una mano
- aquella noche me hiciste llorar -
lo miró a los ojos - pero ahora me doy cuenta que tengo el completo poder sobre ti - sonrió - aproveché para hacer algo que te marque como mío -

El pelinegro lo miró confundido viendo como el rubio salía de la habitación.
Se sentó en la cama, ¿Que podía hacer? No tendría oportunidad de escapar, si lo hacía, lo iban a matar pase lo que pase, deseaba ser libre a toda costa, y debía hacer lo que sea para escapar.

Jimin entró a la habitación rápidamente, empujando a Yoongi contra la cama.

- ¡date la vuelta! - gritó Jimin.

- ¿qué vas me vas hacer? - preguntó el mayor con la voz entrecortada, sentía el miedo en su garganta.

- ¡hazlo! - contestó el menor.

El pelinegro quedó recostado en la cama boca abajo confundido, el rubio le puso una media en la boca mirándolo con la cara más seria que pudo notar por primera vez el mayor, sintiendo como en un rápido movimiento sus pantalones junto con su ropa interior eran quitados de un jalón.
Del frío repentino que había sentido al sentir su parte baja desnuda, sintió como entre sus oyuelos de venus sentía el peor dolor que pudo experimentar en toda su vida.
Mordió la media que tenía en la boca con toda su fuerza, sintiendo como sus lágrimas comenzaban a caer, como su piel comenzaba a quemarse por el hierro caliente.

Jimin lo había herrado.

- ahora tienes mi nombre en tu cuerpo, Min Yoongi -

Luego de estar horas llorando por el inmenso dolor que sentía, fue desarrollando una íra hacia Jimin, estaba harto.
Pero debía ser inteligente, debía ser ágil, y fue ahí cuando se dió cuenta de algo.

Jimin era débil ante él.

Buscó entre los cajones una prenda de ropa interior de Jimin y luego se sentó en la cama mirando hacia la puerta.
Bajo sus pantalones y su ropa interior.

Unos pasos se escucharon y sonido del picaporte indicando que la puerta iba a ser abierta, así que comenzó a masturbarse.

Jimin al abrir la puerta no se esperaba aquella escena tan excitante que se presenciaba ante sus ojos, provocando que sus
pupilas se dilaten.

- ¿te vas a quedar ahí parado viendo como me toco pensando en ti? -

El rubio tragó saliva y su mirada que antes era de sorpresa ahora se tornó a una de lujuria. Se acercó hasta su amado sentandose a horcajadas, y empezo a besar su cuello.

- ¿sabes? ésa vez fingías que no te gustaba, pero yo sé muy bien que me deseas Min - dijo en el oído del mayor.
El pelinegro empezó a acariciar la espalda de Jimin bajando poco a poco a su trasero.

- eres un estúpido, Jimin - pensó.

Con mucho cuidado, fue bajando su mano hasta su muslo, donde estaba la funda de la pistola, arrebatandosela de un movimiento rápido y sacó a Jimin de encima suyo, escondiendo la pistola en su espalda, parándose de la cama.

- ¿Que te pasa? - dijo confundido y enojado el de cabello rubio.

- es que, tengo un poco de vergüenza - río nervioso Yoongi.

Jimin río, y se acercó al mayor acariciando su mejilla.

El pelinegro escondió el arma en la parte trasera de su pantalón.

- ven pequeño - dijo el mayor abriendo los brazos, acostándose otra vez.

El rubio se acercó recostándose al lado de su amado, y éste se sentó arriba.

Yoongi apoyó sus manos en su pecho y fue subiendo hasta su cuello.

- ¿me amas? - preguntó acercándose a los labios del menor.

- te amo demasiado -
Éste cerró los ojos para esperando un beso de parte del mayor.
Pero los abrió rápidamente al escuchar el ruido de un fuerte disparo y un terrible dolor en su abdomen.

- que pena, porque yo no- el pelinegro se bajo de encima del rubio.

- ¿Qué? ¿Que mierda hiciste? - gritó el menor tocandosé su abdomen y viendo su mano llena de sangre.

- ¿que te hizo pensar que puedes confiar en mi? - miró indiferente como el menor jadeaba del dolor.