No sintió curiosidad acerca de Rock lee, de niños estuvo enamorado de Sakura ¿Pero en que momento habian formado tal confianza para visitarse mutuamente? Se golpeó mentalmente, que importaba la Sakura del futuro llevaba una relación fraternal con todos y a demás sabía de la existencia de Metal Lee que eran aquellos pensamientos tontos que se le metian en la cabeza.
Temió que la estupidez de Naruto se le hubiese pegado precisamente ahora de adulto.
Escuchó la voz de Sakura saludando amablemente.
Estaba tan ensimado que perdió minutos valiosos para escapar y es que aquella oportunidad era de oro cuando reaccionó las probabilidades de ser atrapado eran de cincuenta versus cincuenta pero aun así se arriesgo.
Sakura controlaba demasiado bien su impulso de callar a Lee de un solo golpe, tenia los pelos de punta pensando en que estaría haciendo en ese preciso momento el intruso.
-Y fue así como shizune me pidió que viniera a comprobar que estabas bien, Sakura-chan.
Le sonrió con amabilidad, a fin de cuentas no era culpa de Lee llegar en un mal momento, era su culpa arriesgarse tanto.
-Gracias Lee, puedes decirle a Shizune que mañana ya podré pasarme al Hospital, nos vemos mañana.
Cerró la puerta luego de arrastrar a Lee hasta la salida, pudo ver su cara de extrañeza ante su actitud pero poco le importó, ya tendría tiempo para disculparse.
Corrió con todo su ser hasta donde el intruso y ante ella apareció la imagen de algo que ya esperaba.
No estaba por ningún lado.
Mierda...
Esto traía dos grandes preocupaciones; primero que el nivel de aquel ninja era bastante alto y segundo no sabía cuales eran sus verdaderas intenciones en Konoha.
Kakashi se encontraba en su despacho mirado por las ventanas de su oficina cuando una sombra de un ninja corriendo por los tejados llamó su atención.
Era la viva figura de Sasuke pero con el cabello mas largo.
¿Había regraso su ex alumno?
Pensó en seguirlo, pero un golpe en la puerta lo detuvo.
Shizune entró con un varios documentos.
Le saludo con una reverencia.
-Ha llegado información del Raikage
Últimamente habia pensado bastante en el tema de los mercenarios que atacaron en el pais del rayo.
-¿Como está Sakura?
Shizune lo miró con duda pero respondió enseguida.
-No ha aparecido en el hospital, pensé que usted la habia obligado a descansar.
Kakashi negó con la cabeza, era extraño que la devota Sakura no llegará, una sonrisa gatuna asomó en su rostro, shizune lo miró extrada pero lo ignoró, tenia bastante trabajo sin Sakura para preocuparse además por lo que pasaba por la mente pervertida de aqurl hombre.
-De todas formas mandé a Lee a verificar si se encuentra bien.
El actual Hokage sumo dos mas dos y dedujo que algo sucedía entre sus dos ex alumnos.
el ruido de los papeles en la mesa, le sacaron de sus pensamientos.
-Responda lo mas rápido que pueda.
y con ello shizune salió del despacho lamentadose que ahora en vez de una ludopata tenia que tratar con un fan del icha icha.
Sasuke corrió con elegancia entre los árboles, cruzó los fines de konoha como una gacela y cada vez sentía mas seguridad de que estaba solo.
Encontrar a la tortuga era su mayor prioridad, cada segundo allí podia ser un error en el espacio tiempo.
Unos treinta minutos pasaron en una velocidad abismal convinada con la su andar, apenas se distinguía entre los árboles.
Se detuvo para mirar en qué lugar se encontraba, miró el cielo y los árboles para encontrar el camino.
Su concentración duró unos segundos, una ventisca seguida de un kunai atravesó el aire justo al lado de su mejilla.
¿Quién?
Y entonces apareció una mota rosada ondeando en el viento como poseída.
Pensó en lo agradecido que estaba de que su esposa mantuviera su ira encerrado en lo mas profundo de su interior y no arremetiera contra él cada vez que cometía un error en su vida familiar.
