Prólogo

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Años 2123, varias décadas desde que la tierra sufrió un ligero "cambio selectivo" dónde el porcentaje restante es de gente con los mejores genes, sin importar su raza, color, religión y estatus, solo la capacidad física y mental que poseían, luego de que los científicos en el año 2078 descubrieran como crear o replicar el mundo a través de una máquina del tamaño de una ciudad.

Al iniciar la activación de esta, se encontraban 5000 de los mejores científicos del mundo, cuando comenzó, dos rayos de luz se dispararon por accidente al centro del planeta, lo que provocó que se creara una anomalía conocida como "centricloparasis" dado el nombre por los científicos al momento, esto género que la tierra aumentará 4 veces su tamaño, pero a costa de que se activarán varios volcanes y ocurrieran varios terremotos simultáneos alrededor del planeta, esto concluyo con la muerte del 90% de la población a causa de las enfermedades, gases y mutaciones, además de la destrucción de todos los países, y la creación de un único y nuevo continente, el cual es conocido como Armagelón.

                     Año 2123 -presente-

–ahhh que hermoso se escucha el sonido de las aves, su canto y bueno ya saben, es tan relajante y agradable, la luz del sol apenas se refleja debido a la gran abundancia de los árboles en la zona, siento que podría estar aquí toda la vida...

*De repente cae un joven en el agua y alborota la misma*

El joven que ha caído tiene un aspecto físico bastante tonificado, pero el torso tiene llagas por todas partes, como si un animal lo hubiera atacado, no, un animal no haría esto, parecen cortes de una arma tan afilada, es tan raro debido a que ya nadie ocupa ese tipo de armas.

–wowowow, amigo ¿estás bien?

–...

–Oh rayos, creo que ya no se mueve–se acerca al cuerpo y le da la vuelta lentamente para mirar su rostro, al instante queda estupefacto al ver las heridas que tiene– ¡cielos! ¿Que rayos te paso?

–el chico con los ojos entreabiertos y aún con dolor logra recuperar la conciencia– ¿Quien es?

–perdon, pero estás muy herido como para hablar, tienes que descansar por el momento, por cierto puedes llamarme agua.

–...

–y creo que ya no vas responder jaja, tranquilo, descubriré que es lo que te pasó por mi cuenta, por el momento muerde esto–le pone un trozo de madera en la boca–voy a entrar en tu memoria, talvez te duela un poco.

(se ve un ligero rayo de luz salir del agua, entrar al chico y desaparecer)

                        

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¡Heyyyyyy!, Soy mustwer y bueno, conforme vaya avanzando la historia, quiero que me den sus opiniones, comentarios y/o cualquier duda que tengan en cuanto a la historia, sin más se despide su amigo ~Mustwer

Los relatos de aguaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora