4 dangers

Prólogo

Era algo inútil continuar buscandolo para obtener nada. Me sentía exhausta, no comprendo por qué no me escucha si tan solo quiero que comience a cuidarme como debe hacerlo. Se supone que es mi mejor amigo, no creo que deba dejarme tirada como un saco de papás en una fiesta donde solo conozco a su novia. Lastimosamente.

Trate de buscarlo con la mirada una vez más, no lo conseguí. Estaba totalmente perdida. De un momento a otro decidí rendirme, me retiré de la sala dirigiendome hacia el patio. Apenas salí choque mi espalda contra la pared y me deslice hacia el suelo lentamente. Tome mi cara con mis manos tomando una bocanada de aire, para luego expulsarla pesadamente. Mi cabeza se levantó observando el cielo estrellado, la luna brillaba más que cualquier otra noche. A no ser de una sola.

*El bosque no estaba mal, era muy lindo y llamativo adentrarse un poco a la vida salvaje ya que me la pasó día y noche encerrada en mi casa como una prisionera. Pero recordemos que es a voluntad mía, nunca le vi lo positivo a salir de casa y no tener internet ni un buen lugar para ver videos divertidos. ¿Logran entender?

- creo que alguien está pensativa - río Nicolás a lo bajo. Su cabello se movía al ritmo del viento. Era tan hermoso.

- si, lo que digas cuerpo de anguila - o mejor dicho, cuerpo de sexy boy.

No pudo evitarlo y estalló de la risa, acompañe a mi amigo riendo tras recordar mi "insultante" comentario. Sus lágrimas brotaban por sus ojos, seguramente se muera en estos momentos. Estoy segura.

- eres una pequeña idiota cuando quieres, sabías? - paso su brazo por mis hombros apegandome a su cuerpo.

Solo pude responder con un leve sonrojo, su cuerpo era tan cálido que me hacía estremecer con su tacto. Mi mente se encontraba bloqueada en ese momento a tal punto que no reccione cuando beso mi frente. ¡Dios, era un maldito tomate!

- te quiero pequeña, nunca lo olvides. Siempre estaré contigo pase lo que pase, eres lo mejor que tengo. - dijo en susurros cerca de mi oído.

Sonreí inconscientemente, mi mente seguía bloqueada. En simples palabras me tardaba en llegar la información. Era como...

*Beso de Nicolás*
1% 9% 13% 15% 20% 23% 27% 37% 39% 43% 45% 49% 59% 80% 94% 98% 99% 99%.... ERROR

¿Eso querrá decir que tengo una oportunidad?
¿Quizás pueda ser su novia en un futuro?
¿Lograre tener hijos con el?
Espera, me estoy enrredando en mis deseos cuando quizás nisiquiera sean ciertos. *

-Tierra llamando a Eileen -

Me saco de mis pensamientos la persona a la cual no quería ni desearle las buenas noches. Movía su mano desde abajo hacia arriba en frente de mi rostro para hacerme reaccionar, molesta quite su mano bruscamente.

- ¿Que te pasa? ¿Estas enojada duende de jardín? - preguntó con un tono aniñado.

Cuando me molestó suelo ser muy difícil de tratar, al tener un carácter fuerte no es fácil ganarme en una pelea o incluso hablarme cuando surgió un problema entre nosotros. No te pondría una mala cara ni mucho menos agredirte verbalmente. Pero lo que si haría sería dejarte las cosas en claro con una de mis mejores y perfectas sonrisas.

- No - negué fijando mi vista en la lata de cerveza que sostenía con la mano.

- Vamos, se qué estás enojada por algo. Pero aclaremos que nunca te hice nada princesita. - intentó mirarme a los ojos pero yo me negaba observando a un rincón del patio.

- Farrens, me abandonaste para irte con tu noviecita a tener sexo. No me tomes por idiota. - Aclaré empujándolo.

- Hey, no hicimos nada. Solo quería dejarte sola para que algún chico pueda sacarte lo virgen que eres. - Dijo sereno.

Ah no, hasta aquí llegaste Nicolás. No eres quien para meterte en mis asuntos.

- Disculpame, no sabía que te entrometias tanto en la vida privada de los demás. Primero. Si soy virgen es mi maldito problema, no el tuyo, creo que es mejor partir de esa base. Y segundo, no niegues que me utilizaste para darle celos a Mack por qué tú nuncas te comportas conmigo de la forma en que lo hiciste, y menos... - Pause visualizando a lo lejos a mis amigas. Me iré de aquí. - ¿Sabes? Olvidalo, olvídate de mí imbécil. -

Se formó un nudo en mi garganta, sentía espinas al rededor de esta al intentar retener mis lágrimas. Hice una seña saliendo del lugar para que mis amiga siguieran mis pasos, necesitaba desahogarme, olvidar todo, olvidar que solo fui un juguete de una noche. Lo peor de ser fuerte, es que demuestras que lo eres pero lo único que logras es romperte más, por qué las personas te dañan pensando que eres un tacho de basura para tirar sus mierdas allí.

Mi celular comenzó a sonar constantemente, abrí el bolsillo de mi chaqueta para revisar quién era pero una mano me lo quito de las mías. Observo el número y luego colgó. Era Ashley, una de mis tantas amigas, a mis espaldas de encontraban Sam y Vee. Sam me dedico una mirada tierna mientras que Vee solo se limitaba a acosar chicos en la calle. Era una perra.

El silencio nos invadió por completo, Ash continuaba con un semblante serio, quizas será por el odio que le tiene a Nicolás. Puede apoyarme en mis decisiones pero nunca le agrado, a pesar de que siempre demostraba lo contrario. Giro su cabeza mirándome fijamente, su expresión cambio a una de preocupación sonriendo de costado. Intente sonreír pero no me sentía bien, simplemente destrozada. Adiós a mí autoestima.

Al llegar a nuestro departamento no perdí ni un minuto más y subí las escaleras corriendo para adentrarme a mí habitación, cerrando la puerta con seguro. Quería estar sola, solo por esta noche. Descargar toda la mierda que llevo dentro derramando lágrimas, aunque no sea lo correcto. Escuchaba como tocaban mi puerta pero no les di importancia. Seguro sabrán comprender tarde o temprano.

- Vamos Eileen, no seas idiota. El no te merecía. -

- Si nena, no te merecia. -
- De seguro es gay. -

- ¡Vee! -

- ¿Que? Si no la quiere a ella que es una diosa exótica, entonces le gusta el Hot dog con mayonesa. -

- callate! Eres una sucia -

- mira quien habla, la que ve porno de coreanas porque es más torta que mi abuela -

- Ay callate idiota -

- así no ayudan, no voy a poder olvidarme de el. - grite con rabia.

- solo hay una solución para esto ahora que lo pienso. -

-¿Cuál? - pregunte curiosa.

- buscarte un... -

- ¡NUEVO AMOR! A LAS VEGAS PERRAS -

- No tenemos dinero. -

- oh... Al McDonald's perras. -

- NO HAY DINERO -

- No importa, comemos los dulces gratis que le dejan a los niños. Yo los robo. Tranquilas. -

- Vee... Eres una idiota. -