Elsa
Me encontraba en mi habitación tratando de elegir que usar hoy para mí salida con Jack. Ayer después de la Universidad acordamos que nos veríamos a las 16:30 en el Cocoa café, el mismo donde compré los pastelitos que le dí hace ya un tiempo.
Luego de mirar por mi closet un tiempo terminé por usar unos mom jeans claros, un cárdigan negro corto con algunos botones sueltos y unos botines de bajo tacón. Tomé un bolso pequeño y metí mi teléfono, mis llaves de la casa y del auto, un gel de manos y unos pañuelos.
Mi cabello lo até en una coleta alta y desordenada, dejando algunos mechones cortos callendo por mi cara, me puse corrector, máscara de pestañas, blush y brillo labial, traía puesto mi collar y anillo por lo que no me puse más joyas.
Ya lista reviso la hora en mi reloj y son las cuatro y diez por lo que salgo de mi habitación y camino a la salida pero antes de llegar me encuentro con Anna.
— Dónde vas, Elsie? — Dice cuando nos encontramos frente a frente.
— Saldré con un chico de la Universidad.
— Uhhh — Dice emocionada. — Lo conozco.
— No lo creo, es de cuarto año y no muy popular, pero es un buen chico. Se llama Jack Frost.
Su cara cambia drásticamente de una sonrisa a una mueca al escuchar su nombre — Oh... nunca lo he visto pero he escuchado de él, dicen que es bastante raro.
— Por qué? — Dije algo molesta, es claro que no es raro, yo he hablado con él y es bastante tierno, probablemente la gente que dicen que es raro son los típicos que hablan por hablar.
— Dicen que siempre anda solo, con una capucha y es muy aislado, nunca asiste a eventos de la universidad o de compañeros, ni siquiera a los de sus amigos quienes si son populares.
— Y qué si lo hace?!, es su asunto no de los demás, y déjame decirte que es un muy buen chico y por eso iremos a tomar un café, no volveré muy tarde.
Salí de la casa en busca de mi auto el cual estaba aparcado donde siempre, subo frente al volante y comienzo a conducir al café.
Mientras de fondo escuchaba doubt de Twenty one pilots me puse a pensar en cómo había cambiado mi vida por el simple hecho de cumplir 18 años, siempre me cuestioné sobre esas historias de que al cumplir cierta edad tu bruja, vampiro, lobo o cualquier cosa sobrenatural interior se revela, aunque también siempre quise una, sólo que entre mis creaciones jamás había una que decía que me transformaría en una chica con poderes de procedencia desconocida que mataría y detendría criminales por la noche usando un súper traje creado por su fallecido padre.
Miraba las calles de la ciudad atentamente tratando de observar cada detalle de ésta, niños jugaban pero la imagen no era tan feliz, no había luz natural sólo focos con luces ya gastadas, ni la luna ni el sol alumbraban ningún lugar del mundo y a nadie jamás pareció importarle, ya después de tantos años nadie recuerda como solían ser las cosas bajo el mandato de los guardianes y la única razón del porqué sé de ellos es porque mi padre me contaba historias, pero si alguien lo supiese yo sería automáticamente llevada frente a nuestro "dios gobernante".
Llegué al café y estacioné mi carro justo al frente del pequeño edificio. Había llegado unos minutos antes por lo que decidí esperar un rato dentro del carro.
Tenía un mensaje en el grupo que tenía con las chicas, aparentemente la próxima semana había una fiesta y querían ir, leí todos los mensajes desde la barra de estado puesto a que no tenía ganas de hablar. Ya me he perdido 3 fiestas a las que había dicho que iría por esto de salir por las noches sin aviso previo, así que probablemente luego diré que no estoy de ánimos, no sé si estaré libre hoy en la noche menos sabré si lo estaré en una semana.
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La era de los nuevos guardianes.
FanfictionHace miles de años hubo una batalla, guardianes contra la oscuridad, en la cual el destino del mundo fue sellado. Tras el triunfo de la oscuridad, esta dominó el mundo, dejando así a todos sumidos en un lugar lleno de sombras y miedos que rompieron...