Maldita mente traicionera, eres tú de nuevo pidiéndome esos anhelos, tantas tentaciones en tan pocos pensamientos que me vuelven loca sin darme cuenta, la temperatura sube a mi alrededor o eso quiere pensar mi intuición... a quien engaño, todo está caliente en mi, se reaniman mis sentidos y cada fracción de mi piel se vuelve más sensible y delicada.
Los escalofríos que emanan de mi cuerpo son infinitos, tortuosamente adictivo, por mi cuerpo se deslizan gotas de sudor producto del placer. Más allá de lo instintivo y de lo terrenal, esa sensación de erotismo que recorre mi mente me hace sentir bien, me hace sentir viva y disfrutar del verdadero placer de cada tacto sobre mi piel.
Cada sensación me acelera, cada fantasía me hace sentir impura, pero ese sentimiento de impureza me da la certeza de que lo hago bien, mi corazón se agita, más y más, todo se vuelve rápido en mi, quiero parar pero he perdido la razón y el control de mi cuerpo, la noción del tiempo se escapa, aunque desee detenerme no puedo hacerlo, mi mente se ha vuelto adicta a esto, mis jadeos suplican por más.
Yo le llamaría el verdadero sentir.
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Cartas Para Las Estrellas.
PoetryEn las noches podemos pensar que estamos solos pero además de eso tenemos la compañia de las pequeñas luces que adornan la oscuridad, Las Estrellas.
