-No eres mas que una sirvienta, ve y actua como tal-gritó furiosa.
-Lo siento, solo trataba de ayudar-susurré.
-Escuchame bien-se acercó y me miró amenazante-aca la que manda soy yo y por si no lo sabes puedo hacer que te echen en un abrir y cerrar de ojos.
-Y -yo..
No me salian las palabras porque sentía un nudo en mi garganta. Eso fue un golpe muy bajo y queria llorar pero no le hiva a dar el gusto, sufrí cosas peores para que esta vieja me haga llorar ahora.
-Ah, con que vas a llorar?
-No señora.
-No me contestes-volvió a gritar y en eso vi que levanto una mano.
Hay no, esto va a doler asi que me prepare para el golpe pero una voz interrumpió.
-Sabes que si lo haces aca la que va a ir a la calle eres tú, asi que baja tu jodida mano y alejate de ella.
-Señor... yo no queria... ella me obligo a hacerlo y...
-Callate y sal de aquí-dijo serio-..ah y estas despedida.
Anastasia quedó sorprendida por sus palabras y salió de ahí muy enojada. Louis se acercó, hay no, que se supone que debo hacer.
-Te encuentras bien?-dijo dulcemente para luego acariciar mi mejilla-Te lastimó?
-No..-dije apenas, no podia hablar pero ni bien habia contestado ya sentí unos brazos envolviendome fuertemente.
Demonios, si que lo necesitaba.
-Mientras estes conmigo nadie te hara daño.