"No hay tiempo que no llegue, ni plazo que no se cumpla" era una idea que todos ellos tenían en mente. Pero era demasiado pronto para que esto ocurriera, tanto así que parecía inclusive una grosería. Todo estaba callado, en silencio, todos en un mismo circulo, pero nadie emitía ni una sola palabra. Creo que estaban lo suficientemente seguros de que ese momento sería muy lejano y distinto. Y mas porque su voz, su risa, sus chistes yacían encerrados en una caja de madera en la sala de su casa. Su madre se acercaba a ellos para agradecerlos.
—Él siempre los quiso mucho, y su sueño era llegar mas lejos con ustedes...- y rompió en llanto
Ellos solo agacharon la cabeza, Paola la mas cercana a ella la alcanzo a abrazar mientras todos los demás sollozaban. Simplemente no entendían lo que estaba pasando, sentían que eso era solo una mala pesadilla.
Destrozados llegaba el punto de ir a enterrar y darle el ultimo adiós a su amigo y compañero, un joven de escasos 22 años que tenia mucha vida por delante como todos decían. Un sueño cortado y entre todo un ¿Por qué?
-Él muchas veces me dijo que se sentía mal y no... no pude hacer nada- decía Yair con el rostro muy rojo
-No, no es tu culpa, al final fue... su decisión y... siempre hacia lo que el quería- le respondía Betsy dándole golpes en la espalda.
Nadie más podía decir una sola palabra. Solo se podía ser un espectador mas en ese enorme circo que implica la perdida de un ser querido que te hace oler inclusive el dolor de los demás. Una escena catastrófica, horrible, solo así podía ser descrita.
Después de todo el llanto y el dolor cada uno fue a casa solo, Oriana y Yair tuvieron un poco de energía para acompañar a la familia en el rezo en su honor.
—No lo entiendo, no entiendo porqué estamos aquí, porqué está sucediendo esto- decía Oriana con la voz muy apagada.
—No tengo la menor idea, pero si pudiera encontrar al culpable lo descuartizaria y quemaría para que sienta un poco el infierno en carne propia antes...- En eso ese discurso de odio fue interrumpido por su madre.
-Encontramos esto entre sus cosas mientras lo vestíamos quisimos abrirla... pero siempre respetamos sus decisiones y pues tomen tiene el nombre ambos.
Les entregó entonces una carta en sobre sellada con sus nombres como les habían dicho antes.
Para: Ori y Yair
De: AmiAmbos se encontraban un poco consternados del porque una carta en un momento así.
- ¿Qué hacemos con esto? - pregunto Oriana
-Abrirla, ¿qué más?- le respondió él.
Salieron de la sala en medio del segundo misterio, y abriéndose paso entre la gente llegaron al patio trasero buscando una fuente de luz para la mejor lectura."Si están leyendo esto porque probablemente ya este tieso (no como me gustaría) en una caja bajo tierra, esto no es una carta de suicidio y las respuestas aún están en el aire. Ambos saben lo mismo y la persona que les dije que me perseguía lo ha logrado. Sepan bien que esto no fue un accidente o un crimen de odio hacia un estudiante, yo sabia mas de lo que me gustaría que miren como he terminado. Aun no descubro quien ha sido el que me ha estado amenazando solo me falta una última pieza, pero por cualquier cosa aquí les dejo el trabajo. No habrá justicia si ustedes no me ayudan. Y finalmente porque así lo manejaran, yo no me suicide, a mi me mataron. ¿Por donde empezar? Con Jesús hubo un Judas, entre nosotros también. Mi celular se fue conmigo, pero en mi laptop encontraran lo que necesitan y la contraseña ustedes la saben. Solo no digan nada a nadie, desde hoy no pueden confiar en otra persona que no sea uno de otro. Los amo y que mal que acabe así.
Atte: Amitsaday Hernández!-¡Pero que rayos- gritó Yair. Era una gran confesión llegando de la nada, parecía una broma.
-shh, cállate no entiendo ni yo, pero esto debe de ser una broma, el desde hace mucho me decía cosas cobre la muerte y que se acercaba algo y no lo entendía ¿a ti que te decía? - dijo ella.
—Lo mismo... pero rayos que pretende esta es la vida real no una puta serie de Netflix. ¿Y qué hacemos?
—Irnos... ¿Qué podemos hacer tu y yo?
—¿Tu te crees lo del suicidio? Amitsaday era un pendejo, pero nunca tendría el valor de hacer algo así ¿o no? - le dijo él con mucha seriedad.
—Si, pero...
—Él confía... confiaba en nosotros. Es lo ultimo que podemos hacer por él.
Se quedo pensando un buen rato meditando si lo que Yair decía podia convencerla, pero el amor a su amigo era muy grande que termino asintiendo.—Está bien, pero... ¿por dónde empezamos? - dijo ella preocupada
-Él lo dijo... la laptop...
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Gossip Friends: The Last Time
RandomEsta es una historia para pasar la cuarentena basada en un asesinato (el mío) y mi grupo de amigos que a lo largo de la historia se revelan sus secretos más profundos. ¿Los secretos nos unen? No lo creo, a veces nos matan, literal. El tiempo se acab...