La luz del sol se filtraba vagamente por los pequeños huecos de las cortinas, dándole directamente a MinHo en la cara, este después de revolverse varias veces optó por irse a la cocina y desayunar; quitó la amohada de su cara y al pisar suelo, un paso en falso lo dejó cao en el piso, enredado como un burrito a las mantas, y cuando por fin pudo librarse de su propio encierro, rascó su cara, pensativo, sentía que algo se le olvidaba, pero no le dió importancia hasta que se dispuso a hacer sus tostadas.
—Vamos a ver...un detalle importante... —el castaño ponía el pan en la tostadora, abrió la nevera y se quedó pensando en la puerta de esta— ¿se me olvidó recoger a alguien anoche? —cogió la mermelada y la mantequilla— nah, solo HyunJin —volvió a su tarea y sacó su pan, completamente quemado— ¿no me olvide de comprar nada? —dijo lentamente, dándole la vuelta a su tostada incomible para buscar más imperfectos— nah, huelga de hambre.
Un chillido tremendamente agudo, comparable a un delfín asustado —o a una morsa moribunda, como MinHo le dice— se escuchó en el cuarto ahora compartido del mayor
—Oh —el mayor se iba dirigiendo a su cuarto, con una sonrisa vaga en su boca— si,me olvidé de eso.
La puerta se encontraba medio abierta, y por aquel espacio cada uno podía interpretar lo que quería; HyunJin estaba asustadísimo, y estaba siendo víctima de un ataque de cojines, MinHo presenciaba el olvido de su pequeño detalle, y un chico de brackets solo estaba defendiendo su piso compartido con el más mayor.
El chillido subió de volumen, el alto se tapó los oídos y buscó con la mirada a su amigo sin darse cuenta que este estaba en el marco de la puerta medio escondido; satisfecho
—¡Dejar de gritar! —dijo finalmente el castaño, deteniendo los movimientos del otro individuo parado al frente suya, al hacerlo se llevó un manotazo— ¡Que pares! ¿¡Dios mío pero quién eres!?
—¡Eso debería decir yo! —su voz cambió un poco, pero tampoco demasiado, HyunJin supuso que era más pequeño que él— ¿¡Que haces en el cuarto de mi Hyung!? —le apuntó de forma acusatoria, tan cerca de su nariz, que el alto para seguir viendo el dedo tuvo que poner ojos bizcos, MinHo en su escondite quería fallecer de la risa
El chico desconocido corrío hasta la pequeña mesa de noche que separaba a buena distancia los dos colchones, agarró la lámpara que reposaba en esta y esta vez era HyunJin quien chilló pidiendo ayuda, saltó de la cama mientras era perseguido por el más bajo.
—¿¡Donde tienes a MinHo!? ¡Donde lo tienes! ¡Dímelo! —lamparazo— ¡Dímelo! —lamparazo— ¡Dime donde está!
—¡Eso me gustaría saber a...!
—¡YA LLEGÓ POR QUIEN LLORABAN! —el demandado levantó las manos en señal de rendición, mientras hacia todo lo posible para no reirse
—¡Idiota! —dijeron los otros dos chicos a la vez— ¿¡Quién es este!? —volvieron a decir al mismo tiempo, a la par que se señalaban al instante— ¡Eh, no me señales! —soltaron al unísono una vez más, y comenzaron una pelea donde las manos revoloteaban y ellos cerraban los ojos
—Ah, he creado el caos y la confusión —suspiró el mayor, estirándose— me encanta.
El de frenillos dió for finalizada la pelea, al fijarse en un MinHo que solo tenía la ropa interior en esos momentos, HyunJin seguía peleándose solo, moviendo sus manos al aire, y cuando se dió cuenta que estas no impactaban contra nada, abrió los ojos y casi salen de sus orbitas
—¡Hyung! —escandalizó el más pequeño de la habitación— ¡yo aún soy menor!
—¡Y yo! —exclamó el aludido— ¡choca esos cinco! —le extendió la palma y este salió corriendo del cuarto.
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𝑩𝑹𝑰𝑮𝑯𝑻 𝑺𝑰𝑫𝑬 𝑶𝑭 𝑻𝑯𝑬 𝑴𝑶𝑶𝑵
AvventuraHyunJin, con tan solo 17 años recién cumplidos, deja a su familia de acogida destruida con la nota de su madre para irse a vivir con su mejor amigo, olvidarse de todas sus cargas que lo llevan atormentando desde una necesitada infancia, buscando a s...