Mundos Sin Química [ Y I Z H A N ]

✧Capitulo 7✧

Anteriormente había tenido un bldoqueo a tal grado que había decidido borrar la historia (´ . .̫ . ') algunas personas comentaron que era mejor dejarla en pausa y decidí justo hacer eso...y pues...aquí me tiene escribiendo el capítulo 7 XD me siento muy avergonzado de haber publicado el comunicado
(´；ω；｀) bueno, disfruten.

-¿Algo más? ¿A qué te refieres? -yibo se acercó con curiosidad.

-estoy seguro que te diste cuenta que no tengo poder ni nada de eso -hizo una breve pausa mientras jugaba con sus dedos - así que no se si podría ser de auténtica utilidad - miro algo afligido a Yibo, quién suspiro y se acerco.

Sus respiraciones chocaban de la cercanía y causó un leve rubor en las mejillas de zhan, quién estaba algo sorprendido por la acción creyendo que Yibo lo iba a besar, sin embargo eso no ocurrió, Yibo dejo ir una pequeña risa y se alejó nuevamente para mirar a Zhan, quién se encontraba con los ojos cerrados y las mejillas coloradas, justo ahí, Yibo se dió cuenta que Zhan esperaba que lo besara, se asqueo.

-Abre los ojos mariposa - su tono de desagrado impulso a zhan a abrir los ojos bastante avergonzado por su acción y preguntarse porque había echo eso Yibo.

-Mira tu cuello, te protegerá - dicho eso le dió la espalda a zhan y se fue caminando.

Cuando zhan dirigió su vista a su cuello vió un hermoso collar con una piedra blanca con forma de conejo, era bastante lindo.

-¡Oye! ¡Tú! ¡El sirviente de ahí! -una voz masculina lo hizo mirar a el lugar de donde venía- ¿Eres nuevo? -el hombre se acerco a Zhan.

- Bueno, si, soy nuevo, lamento no presentarme adecuadamente.

-Bueno, yo soy el emperador ChuYue, ven conmigo -dicho eso comenzó a caminar rumbo al jardín, pronto lo siguió Zhan, ya que Yibo le había dicho que era un sirviente ahora y aparte ¡Se encontraba con el emperador! No podía simplemente desobedecer las órdenes.

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-Actualidad-

Ahora estaba abrazando su abdomen con un inmenso dolor en él debido al golpe que había recibido antes, finalmente Chuyue lo escoltó a una habitación cerca del jardín dejando la orden a una sirvienta de que debía cuidarlo y llevarle algo de medicina.

Definitivamente Yibo mintió con el dolor era horrible, nunca ha Is peleado y para ser la primera vez que lo habían golpeado tan fuerte en el abdomen, creía que se le habían roto al menos...todas las costillas.

Caminó por el lugar patrullando y buscando a una joven dama, ya que el era el guardaespaldas de la joven princesa, hermana del emperador.

-Yibo~ -la voz femenina llamo la atención de Yibo, causando que se girara con una sonrisa en el rostro, era la princesa Ziyi, una princesa realmente hermosa.

-Ziyi mi princesa -se acercó a ella y la tomo por la cintura mientras depositaba un suave beso en su frente.
- Yibo, ¿Porque te has acercado tanto a ese chico? - hizo un puchero mientras miraba a Yibo a lo que el rió un poco ante la expresión de su amada.

- Sólo le di algo que le servirá, aún sigues siendo la única que amo -le beso finalmente removiendo el enojo de la jóven, quién sonrió y tomo a Yibo de la mano para caminar por el lugar nuevamente.

Wang Yibo había comenzado a trabajar para el palacio cuando era un jovencito de no más de 12 años, comenzó como sirviente para posteriormente y con entrenamiento convertirse en un guardaespaldas digno de la realeza, leal y brutal en pelea, su poder era tremendamente fuerte, no por nada ahora era guardaespaldas de la princesa, hermana menor del Emperador, el personalmente le había pedido que cuidara de su hermana, sin embargo, la continúa convivencia y algunos coqueteos constantes causaron que algo más que cariño aflorara en ambos, dejando así una relación que llevaban de al menos 2 años, Ziyi y Yibo planeaban casarse e irse de ahí ya que sabían que Chuyue no querría a Yibo como pareja de su hermana, podría ser poderoso, Inteligente y guapo, pero Chuyue quería lo mejor de lo mejor para Ziyi, y Chuyue hasta ahora no había mostrado señales de querer que su pequeña hermana tuviera pareja, para él, Ziyi aún era una pequeña que jugueteaba por el jardín y perseguía flores.
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