Irresistible Atracción

|• ¿Quienes somos ahora? •|

Abrí los ojos lentamente, los sentía pesados y dolían con madre.
Quise mover las manos pero estaba inmóvil atada a la cama.
Termine de abrir bien los ojos y me pude ver, estaba amarrada de manos y pies y totalmente desnuda.
Si había pasado algo horrible la noche anterior no lo recordaba.
Mire a mi alrededor y en la cama de alado estaba Pao de la misma manera que yo.
Las lágrimas brotaron de mis ojos, la culpa me carcomía por dentro. Me odiaba por no poder protegerla, por no cumplir mi promesa.

El ruido de la puerta abriéndose me hizo voltear bruscamente la mirada para encontrarme a un chico, cabello café achinado, ojos color marrón, alto, delgado y con un porte de superioridad.

-Ya despertaron - Dijo el tipo, yo intente responderle pero mi voz no salia.
-Es inútil, jamas podrás - dijo al momento que se dio cuenta de mi acción.
Lo mire con odio, pero el ni se percato solo tomo camino a donde estaba Pao. Se posó a su lado y me miro
-Realmente la disfrute - No se que me pareció mas repulsivo, su voz, lo que dijo o la forma en como lo dijo, yo creo que las tres.
Maldito patán pensé.

-Lo se soy un patán, pero no puedes esperar otra cosa de los hermanos Pascuarelli - mi cabeza formula muchas preguntas de las cuales no obtendré respuestas ahora pero de lo que sin estoy segura de que hay gato encerrado y de que el me leyó la mente por que tal vez lo de patán no se lo dicen a diario - si pudiera hablar le diría muchas palabras obscenas a este pedazo de mierda.
-Bien habla - en respuesta mi boca pudo por fin abrirse
-Eres un maldito, por que le hiciste eso. Que no te diste cuenta pedazo de porquería que ella era virgen. Por que carajos no me tomaste a mi. No debiste hacerle tanto daño.
Sinceramente pienso que me veo estúpida reclamándole a un tipo estando atada a la cama.
-Exactamente por eso la tome esa noche, pero ella no dejaba de implorar tu nombre. Por que... ¿Tu eres Karol no?
-Eso que verga te importa insecto - trate de sonar dura pero creo que fue todo lo contrario.
-Que boquita, me preguntó si así como dice obscenidades también las hace.
Se dirigió a mi y se paro al pie de la cama. Exactamente donde tenia totalmente expuesta mi vagina a su vista.

Comenzó a mirarme, y rápidamente se desabrochó el cinturón hasta quitárselo, prosiguió con su camisa de botones sacando uno por uno, con una tranquilidad que a mi me parecía fastidiosa, paso a sus pantalones hasta quedarse en bóxer para después deshacerse de ellos también.
No quise mirar así que cerré los ojos y solo me agarre con fuerza a los grilletes esperando.
Después de unos minutos sentí sus manos en mis tobillos para después escuchar el sonido del grillete siendo soltado, y hací paso a mi otro pie y hasta mis manos.
Me tomó de los cabellos y me obligo a caminar hasta la cama donde estaba Pao. Me arrodillo en el suelo y sentí como me quede inmóvil como aquella noche.
El soltó a Pao de la misma forma en como lo hizo conmigo.

Ella estaba inmóvil, no se si de la misma forma que yo o era por algo mas.

No se que le abra echó este salvaje por que yo solo recuerdo un grito por parte de ella.

Con un movimiento de su mano ella despertó, tuve la inercia de acercarme pero no podía. Pero aún podía hablar y eso ya era ganancia.
-Pao estoy aquí nena - Ella estaba desorientada lo podía ver en su mirada

Su mirada se dirigió hacia mi y luego hacia ella misma.

Sus ojos comenzaron a llenarse de lágrimas.

Vi al tipo parado frente a ella y sus ojos de llenaron de pavor.

Pedía ayuda a gritos, pero ambas estábamos pérdidas en manos de este malnacido.