Aléjate de mí (Pausada)

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Un chico le sostenía los brazos mientras el otro le seguía dando repetidas cachetadas en su barriga, su piel ya estaba roja y dolía, por más que gritara solo escuchaba la risa de los demás. Seguía golpeándolo, el ruido de sus palmas en su piel era molesto como el ruido de unas uñas raspando una pizarra.

El sonido molesto del despertador lo saca de esa pesadilla. Estira su mano y lo apaga. Hace mucho que no soñaba con esas cosas, pero sabía que al ser el primer día de clases sus más grandes miedos lo iban a perseguir en sus sueños.

Se levanta de mala gana, no es un buen madrugador, pero si quería estar en la mismas clases que su amigo debía tomar el turno de la mañana.
Se pone el uniforme que preparó la noche anterior, pasa rápidamente al baño y termina de prepararse.
En la cocina prepara un tazón de avena, con unas rodajas de manzanas para darle algo de sabor, ya no recuerda lo que eran sus desayunos antes.

De camino a la escuela espera a su amigo en la esquina donde habían quedado en encontrarse, pero no lo vé, aún era temprano, pero era raro que llegara él primero.

Da media vuelta y lo vé corriendo hacia él, con unos pasteles en su mano.

—ah! Jimin! La tienda de acá estaba cerrada, tuve que ir a la otra— le dice el chico un poco agitado.

—vas a desayunar eso? — Jimin le pregunta con un tono acusador.

—si! Te compré uno por si se te antojaba.— le contesta ofreciéndole un paquete.

—no, gracias... Ya desayuné. —le contesta con una sonrisa falsa.

—vamos! — grita el chico animándolo.

Kim Taehyung era su mejor amigo, no había algo que no hicieran juntos, cuando decidió cambiarse de instituto el otro no dudó en seguirlo. No perdían mucho ningunos de los dos, no tenían más amigos, Taehyung era el 'raro' y Jimin también tenía sus problemas.

En la entrada Jimin se detiene.

—no pasa nada — le dice Taehyung tironeando de su ropa para hacerlo entrar — ya revisé todos los nombres, nadie nos conoce.—

Con mucho miedo entra al instituto, los otros chicos entraban educadamente, pocos ya parecían conocerse e iban de a grupos, pero la mayoría estaban solos.

Después de encontrar su aula toman asiento. Jimin inspeccionaba cada chico que entraba. Decir que estaba nervioso era poco, su corazón se aceleraba al ver a alguien nuevo entrar. Por más que Taehyung se lo repitió veinte veces Jimin estaba preocupado de que alguien de su viejo instituto entre ahí, lo reconozca y que su vida sea una pesadilla de nuevo.

De repente entra su profesor, tira un suspiro de alivio y mira a su amigo, estaba vez con una sonrisa genuina.

Mientras el profesor saludaba y daba la bienvenida a los nuevos estudiantes Jimin se agachó para sacar su cuaderno y su cartuchera.

—este es el plan de estudios, al final está el calendario con las fechas de los exámenes del año. —explicaba el profesor hasta que fue interrumpido por un estudiante que entraba tarde. —pasa, por ser el primer día no hay amonestación, pero sepan todos que llegar tarde no es una opción.—

—si, disculpe.— el chico entra rápido y se sienta en el primer asiento vacío que ve.

Jimin tenía todo ordenado en su pupitre y se dispuso a escuchar a su profesor, cuando empieza a dictar información importante que debía ser anotada el compañero de su lado lo llama para pedirle prestado una lapicera. A decir verdad Jimin no había ni mirado a ese chico cuando entró, le importaba más el orden en su pupitre. Obviamente tenía una lapicera de más y sin problema la toma para dársela. Cuando extiende su mano y finalmente lo vé su corazón se detuvo.

—gracias. —le agradece el chico y se apresura a escribir.

Claramente no había reconocido a Jimin y contradictoriamente de lo que sentía Jimin, en vez de aliviarse que no lo reconoció su sangre empezó a hervir, de todos de los chicos del instituto viejo, tenía que ser él.

El chico al sentirse observado vuelve a mirar hacia Jimin y le regala una sonrisa. Jimin se limitó a correr la vista, mirar al frente y taparse con un brazo.