Good Love

Parte 13

Parte 13: La duda

Relato por Mew

El toque de algo suave en mi mejilla, me despertó del profundo sueño en el que estaba. Cuando abrí los ojos todo era borroso. Dejé de sentir ese toque en mi mejilla y siento que toman de mi mano para entregarme algo.

– Tranquilo, son tus lentes – me dijo Gulf suavemente.
– ¿Pasa algo? – pregunté tratando de sentarme y ponerme mis lentes
– No, sólo quería avisarte que me iré a casa, no quería irme así nada más sin despedirme
– ¿Te vas ya? Pensé que desayunaríamos juntos – dije completamente desanimado.
Quería aprovechar la hora del desayuno para que pusiéramos las cartas sobre la mesa, pero algo en mí me decía que esa platica iba a demorar demasiado en llegar.
– Había olvidado que tenía que llevar unos papeles a la universidad. Mamá me lo recordó hace unas horas.
– De acuerdo, entonces deja me lavo la cara y te llevo – dije levantándome rápidamente de la cama.
Gulf me detuvo de la muñeca.
– No hace falta Phi, mamá ya está abajo esperando.
Gulf se levantó de la cama y le di un abrazo, él solo respondió con unas palmaditas en mi espalda y se dispuso a irse.

Antes de que terminara el año, teníamos tres eventos más. El lunes que seguía no se estrenaría episodio, sólo un pequeño episodio acerca del personaje Long. Pero el episodio final se transmitiría hasta el 6 de enero. Prácticamente Gulf y yo nos veríamos muy poco. Después de esos eventos, vendrían las celebraciones de año nuevo, así que era más que concreto que nuestra platica pendiente corría el riesgo de quedar en el olvido.
Ese mismo día en la noche mi celular sonó con la entrada de una videollamada. Era Gulf. No era nada importante en realidad. Simplemente quería contarme como le había ido con su entrega de papeles para sus prácticas y me preguntó qué era lo había hecho yo en el día. Y eso fue todo, no toco ningún otro tema más, y yo tampoco me atreví. No, por videollamada no.

Los tres eventos se pasaron demasiado rápido. Tengo que admitir que hacer fanservice en estos últimos tres eventos fue más difícil que nunca, y no por que se dificultara hacerlo, si no porque sentía que nos estábamos excediendo. Honestamente yo no podía controlarme estando cerca que Gulf. Quería tocarlo, quería acariciarlo y Gulf no me estaba ayudando mirándome de esa manera que me ha estado mirando últimamente. ¿Acaso quieres que te bese frente a todo el fandom Gulf?.

Un día después del último evento, era 26 de diciembre. Ya estábamos a nada de acabar el año. A partir de 27 me iría a casa de mis padres a quedarme ahí los días de año restantes y probablemente hasta el estreno de episodio final. Tenía que admitir que ya extrañaba a Chopper demasiado. Además tenía tiempo sin ver a mi hermana y ella también vendría para pasar año nuevo con nosotros.
Me encontraba haciendo mi maleta, cuando mi celular empezó a sonar.
Era una llamada normal de Gulf.
– Phi ¿Qué haces?
– Empacando para irme a casa
– ¡auu! - reaccionó sorprendido – ¿te irás muchos días?
– Por lo menos hasta después de estreno de último episodio
Yo sostenía el celular pegado a mi oreja ayudándome con mi hombro, pues seguía empacando mis cosas. Gulf guardo silencio unos largos segundo.
– ¿Qué pasa? – le pregunté. Dejé de hacer mi maleta y me senté en la cama.
– Tenía algo en mente, pero, no sé si sea buena idea
– Sólo dilo Gulf, no le des tantas vueltas al asunto.
– Pensaba que sería buena idea que hiciéramos una cena antes de año nuevo, juntos y nuestras familias...
Sentí mariposas en el estomago. Nuestras madres se habían visto alguna que otra vez, cuando mi madre me visitaba al set o me acompañaba a un evento y la madre de Gulf siempre iba a dejarlo a cualquier lugar que él tuviera que ir. Pero en realidad jamás han convivido más de 10 min. Con nuestros managers es diferente, ellos si tienían contacto demasiado tiempo. Esto que Gulf me estaba diciendo para mi era, como una declaración disfrazada, o por lo menos así lo sintió mi estomago que no dejaba se sentir cosquillas.
– Sí – dije después de unos segundo de silencio – ¿Qué día tenías en mente?
– Tal vez... pasado mañana ¿qué opinas tú?
– Por mi está bien. Llegando a casa se lo comentaré a mamá y a Boss, ¿de acuerdo?
– De acuerdo... bye bye
Me ganó la risa con su repentina despedida. Sus llamadas se habían vuelto muy concisas y rápidas. Tal vez no quería que tuviéramos mucha cabida a la platica, sólo llamaba, me informaba lo que tenía por decirme y me colgaba.