Grietas que gotean

HUYENDO DE ELLA

Yo, un tipo como cualquiera tal vez, de aquellos que aún viven con sus padres, salen con amigos y lloran por las noches.

Claro nunca digo que lloro las noches, por qué siempre soy alegre o al menos lo aparento, al menos desde que ella llegó.

Y ok es obvio que con nadie voy a hablar de lo que ella me hace cuando estoy en mi cuarto solo y siento como todo se va rompiendo dentro de mi, tienen razón cuando dicen que somos entre 50% y 70% agua por qué literalmente cuando siento como todo se agrieta en mi, comienzo a llorar y a correr desesperadamente, solo espero que mamá venga a abrazarme diciéndome ¡NO ESCUCHAS QUE ES HORA DE IRTE A LA ESCUELA! - que bueno, tal vez no sea un abrazo pero al menos con eso podré dejar de llorar y continuar mi vida.

En fin regresemos tres años atrás!

En la aburrida secundaria, llegando tarde como siempre y sentándome en las últimas sillas con los vagos del salón, yo sabía que no era de ahí pero eran los únicos que me aceptaban aún que en ocasiones me golpeaban, estoy bien decía siempre, no hablaba con nadie y no entregaba tareas, llegaba a casa y me acostaba a pensar ¿Por qué? Esto es horrible y aparte no tengo nada más que hacer.

Agh lo peor de todo eran mis malas decisiones, enamorarme de alguien que me fue infiel 3 veces, confiar en mis amigos vagos para humillarme después, no tener el atrevimiento de decir una miserable palabra cuando todos se reían de mí forma de vestir - Algo anda mal ya no quiero esto ya no más...

Por minutos veía que ya era de noche que estaba llorando y me dolía el pecho y mi cerebro estaba muy caliente, puse música, escuchaba Nirvana en ese momento - ¿Qué esto? Me duele mucho sentía como aquello me consumía y la música era más fuerte, ¡grite! y alguien dentro de mi salía corriendo, era perseguido mientras me rompía a pedazos escuchaba una voz, Hiiii hijjjjj ¡Hijo! ¿Qué tienes? - era mi papá viéndome en crisis, me hice el dormido aún que me seguía hablando, no quiso insistir y se fue a dormir.

- A partir de ese momento, ese día se repitió 1,095 veces. Hasta que escribí esto por primera vez.