-Buenas tardes, Habla con Marcela Lago, del centro de información de la WIC. ¿En qué puedo ayudarle?
Al otro lado de la línea telefónica, Abby, se encontraba ansiosa por saber cuándo había sido programado su casting como aspirante a estudiante de la Institución más importante del continente Americano en Artes clásicas.
- Mi nombre es Abril. Identificada con el código 03452. Dijo mojándose los labios.
-Un momento, verificaré la información. Dijo la voz en el teléfono.
Mientras tanto Abby, chasqueaba sus dedos, nerviosa por la respuesta.
-¿Podría deletrear su Nombre? Preguntó la recepcionista, entre ruidos de teclas de computadora.
- ¡Si, claro! Es A-B-R-I-L A-Z-E-S
-¿Abril Azes? Has sido convocada para dentro de dos semanas, en el auditorio Gael, en tu ciudad. A las 3:30 p.m el día 25 de abril. Cualquier otro tipo de información podrás consultarlo a través de nuestra página web: www.academicwic.com
-Muchas gracias, dijo Abril intentando contener la emoción. Y colgó.
Estaba tan emocionada, hacía dos años que había enviado un video con una coreografía inédita realizada por ella. Estaba en la lista de espera de la academia WIC desde entonces y si solo hasta ahora, le concedían la oportunidad de presentarse frente a un exigente jurado compuesto por los tres más grandes artistas del ballet en los 70s.
No tardó ni cinco minutos desde que había colgado. Cuando le envió un mensaje instantáneo a Laura su mejor amiga. O más bien su única amiga.
Realmente Abby, podía tener más amistades, pero socializar no era su prioridad. Realizar un buen método Vaganova, en sus movimientos, eso sí que era importante.
Laura de la misma edad de Abril, era su opuesto, aunque eso no les impedía mantener la amistad cercana que las caracterizaba.
Esa tarde ambas se encontraron en el cine local, para ver la película más reciente de Ashton Kutcher. El edificio donde funcionaba el cinema, aunque ya era algo viejo, siempre tenía los mejores estrenos en películas de toda la ciudad.
Abril miraba los diferentes carteles de las películas colgados en la pared, mientras esperaba a su amiga. Esa tarde no se había arreglado mucho. Estaba tan acostumbrada a usar su cabello recogido, que era difícil verla como estaba, pero era un día muy especial. Con sus cabellos sueltos, un vestido blanco que acentuaba su delicada figura y unas baletas de color palo de rosa, eso era lo que había escogido para usar.
Aun cuando no estaba en el estudio ensayando, mantenía sus poses, como una costumbre. Era normal, verla parada en la primera posición y pasar rápidamente a la tercera, y eso solo mientras miraba a su alrededor.
Había llegado Laura, siempre tan bien vestida, con blusa en conjunto con una falda color menta que le llegaba a su cintura, sus cabellos rizados negros sueltos y maquillaje. Después de un breve saludo, hacían la fila para comprar las boletas.
-Dos boletas para ver esa película. Dijo Abril señalando al tercer cartel, que presentaba un par de actores mirándose con odio entre ellos, y detrás una mujer con cara de confusión.
-Aquí están sus boletas y sus vueltas. Que disfruten la película.
Ambas salieron de la fila, Mientras esperaban que llegara la hora para ingresar a la sala de cine, se reían una con la otra, de cualquier cosa, cualquier motivo les servía para sentirse feliz. Pues Laura, al igual que Abby, había conseguido un gran logro. Entrar en un programa de Investigación para estudiantes precoces.
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Hasta verte triunfar
Teen FictionAbby, es una adolescente que ama el ballet, casi por sobre de su vida, se esfuerza a diario por construir una buena carrera para su futuro. Pero, sin buscarlo encuentra el amor con un muchacho, Josh. ¿Cómo le afectará esto?