ÚNICO

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Cuando Minho llegó hasta su novio diciéndole que ya no podían seguir juntos porque ahora estaba enamorado de una chica, Chan no pudo evitar no creerle en lo absoluto.

Sí, quizás su vecina era hermosa y muy linda, pero él no se tragaba el cuento de que de la noche a la mañana era heterosexual de nuevo. Quizás la madre de Lee tenía algo que ver, pues la señora nunca estuvo de acuerdo en la relación del australiano con su hijo, pero no sabía nada con certeza y moría por descubrir si todo aquello era real.

Cuando su amigo Changbin lo invitó a una fiesta que organizaría en su casa estuvo a punto de negarse, pero el bajo le hizo saber que su ex estaría presente y solo eso bastó para que Chris diera una respuesta positiva.

En la fiesta, que no era más que un grupo de personas bebiendo, fumando y bailando con música extremadamente alta en una, relativamente, pequeña residencia, Chan divisó a Minho con su novia en una esquina.

Ryujin, su novia, llevaba un bonito vestido color azul marino que se amoldaba perfectamente a su pequeña figura, Minho mantenía una mano sobre la cintura de la chica.

Chris recordaba cuando era él quien ponía las manos sobre la cintura del menor.

Disimuladamente continuó observandoles, examinandolos.

Cuando el muchacho iba por su quinta copa fue cuando lo vió por primera vez besarla. La peliazul lo besaba con necesidad mientras que él parecía querer ir a un ritmo más lento, al separarse la chica tenía las mejillas coloradas y el cabello un poco desarreglado, sonreía, Minho le sonrió y luego volvió a su rostro neutro.

Chan comprobaría algo esa noche. Se dijo a sí mismo que no tenía nada qué perder, y con la barbilla en alto se dirigió hasta donde las personas bailaban animadamente. Fue entonces cuando un chico se le acercó con una sonrisa más contagiosa que el ritmo que estaba bailando.

"¿Bailamos?" cuestionó, aunque él ya lo estuviera haciendo. Asintió sonriendo también.

"Mi nombre es Jisung." Informó. Le dió la espada y siguió con el ritmo.

"Mi nombre es Bang Chan." Puso una mano sobre su cintura, sonriendo al notar lo estrecha que era.

"Bien, Bang Chan, vamos a divertirnos." El casi desconocido siguió meneandose al compás de la música, siendo secundado por su, ahora, pareja de baile.

Minho volteó hacia las personas que bailaban cuando su novia le pidió hacerlo también, entonces lo vió. Bailando con alguien que en su vida había visto, y podía jurar que él tampoco lo había hecho, con gran confianza y química entre ambos. Le pidió a la chica que bailaran en el lado donde había menos personas, básicamente del lado opuesto a su ex. No quería ni verlo a los ojos, aquella mirada que lograba hacer que le temblaran las piernas. Definitivamente no quería que su novia lo viera en aquella situación.

El mayor, por otro lado, realmente estaba divirtiéndose con Jisung, el chico era muy carismático y lindo. Con una actitud positiva y brillante, su sonrisa te provocaba imitarlo enseguida. Además, se movía de lo mejor en la pista. Después, cuando recordó por lo que realmente estaba ahí, volteó hacia la esquina donde anteriormente se encontraba la pareja notando que ya no estaban, así que con la mirada los buscó un poco hasta que los encontró a su lado izquierdo a algunos metros de él, Lee lo veía atentamente y al instante en que volteó hicieron contacto visual.

Chris se negó a apartar la mirada, lo mantuvieron hasta que el menor se sintió demasiado nervioso, obligándose a volver la vista hacia su novia. Y se sintió culpable, la chica bailaba, esforzándose por hacerlo bien ante su novio, siendo tan hermosa como siempre era y amándolo incondicionalmente como lo había hecho desde que eran unos pequeños vecinos.

Ahí llegaba aquel pensamiento de 'no merece a alguien como yo, merece algo mejor', que solo era una excusa para sus verdaderos sentimientos. Odiaba tanto ser débil ante su familia y sobre todo ser débil ante su ex, pues con él era con quien corría más peligro.

"¿Amor?, ¿Estás bien?" Ryujin le sonrió reconfortante dejando a la vista aquella adorable sonrisa.

"Sí... Solo... Me siento un poco desorientado." Respondió, brindando una mueca en intento de una sonrisa.

"Es el alcohol, bobo." Rozó sus narices y dejó un besito en la comisura de los labios del muchacho.

Minho cerró los ojos reprimiendose una vez más, tomó de las mejillas a su novia y la besó. La chica no se quejó por el repentino acto, dejándose hacer, sintiendo la lengua de su chico contra la suya.

Todo iba de maravilla, en teoría, hasta que la chica giró el rostro para profundizar un poco más el beso, Minho abrió los ojos y gracias a la posición tuvo un claro panorama de lo que ocurría frente a él.

Su ex lo veía con insistencia, nuevamente el contacto visual se sentía tan intenso a través de aquellos gatunos ojos oscuros. Chan empujó su lengua contra su mejilla interna aún viéndolo a los ojos y el menor casi se atraganta.

Lee se separó abruptamente de los labios de su pareja, provocando que Ryujin le viera confundida mientras el tosía.

"¿Pasó algo?" Ella le acarició la mejilla con preocupación.

"N-nada... Yo sólo... Voy a el baño." No permitió que respondiera, pues a paso rápido salió de entre el gentío y se dirigió hasta el baño principal de la casa.

Se vió en el espejo, estaba sudando y tenía la respiración agitada, se mojó la cara con agua fría, mientras se secaba el rostro con algo de papel escuchó la puerta siendo abierta.

Una silueta conocida se hizo presente, Minho sintió su garganta secarse. Justo cuando sintió que diría algo, Bang solo fue hasta el lavamanos para poder lavar sus manos con una gran e intencional lentitud. El menor se quedó estático en su lugar con una batalla interna por cómo reaccionar y qué hacer.

El silencio sepulcral en el cuarto de baño se sentía como si quemara. De algún recóndito lugar encontró algo de la valentía que parecía siempre hacer falta en él y de forma casi automática estrelló con algo de fuerza la espalda de Chan contra la pared trás de él buscando con desesperación sus labios.

Christopher sonrió burlesco, correspondiendo el beso que había iniciado su ex. Los besos de Chan se sentían tan diferentes a los de Ryujin, con ella temía ser demasiado brusco y cargado, además que él era el quien siempre tenía que llevar el mando, con Chan todo era apasionado y despreocupado, sabía lo que hacía y él simplemente lo dejaba hacer su voluntad.

El mayor, decidió tomarlo por los muslos para cargarlo y sentarlo en la encimera del lavamanos. Minho se apoyó contra el espejo, echando la cabeza ligeramente hacia atrás, manteniendo los ojos fuertemente apretados mientras que el contrario besaba y succionaba la piel color caramelo de su cuello, dejando marcas superficiales que se quitarían en unos momentos.

El menor tomó las manos de Christopher, llevándolas directamente a sus muslos internos, él comprendió lo que quería, y entonces separó sus piernas para meterse entre ellas y tener un mejor acceso, volviendo a besarse.

Satisfacción reinando en él al sentir que el muchacho no ponía resistencia en abrir las piernas para él.

El caliente show se vió interrumpido por una suave voz.

Ryujin llamaba a su novio por su nombre, pues creía que se había tardado de más, no obstante, calló abruptamente al abrir la puerta y encontrarlo comiéndose la boca con otro hombre.

La chica se fué rápidamente cuando ambos posaron su atención en ella. El corazón de Minho se estrujó un poco al ver el semblante triste de su novia, aún así no intentó moverse de su lugar.

Chan sonrió, con cautela se acercó hasta la oreja del muchacho, este jadeó al sentir un húmedo beso trás de ella y una leve mordida sobre su lóbulo. Entonces el mayor susurró, provocando que se estremeciera ante su aliento contra su oído.

"Solo tenía curiosidad de si realmente decías la verdad... Como siempre, yo tuve la razón."

Y se fue. Dejándo al menor sintiéndose patético y triste a la vez.

CURIOUS (Banginho)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora