Nuestro Secreto 2: Un Secreto Más Profundo

Capitulo 1: Comienzo

Jack se encontraba tumbado en su habitación, todo había salido bien durante unos meses con Max pero el chico había conseguido una creciente fama y se había ido de gira, ahora casi no tenían tiempo para hablar y cuando lo hacían sentía como que a Max no le importaba lo que el tenía que decir. Cogió su teléfono y comenzó a escribir a Max, el chico estaba en linea pero no le leía, Jack estaba comenzando a enfadarse, él había vuelto de Nueva York por el y Max simplemente le ignoraba. Suspiró y lanzó su teléfono contra la pared y se tapó la cara con la almohada.

Dylan por su parte se encontraba en la biblioteca leyendo un libro de terror titulado "Vigila quien llama" que había sido escrito por JL Cyrus, la historia le estaba encantando, estaba a oscuras ya que el estaba trabajando como uno de los bibliotecarios allí para poder pagarse una buena universidad sin que sus padres tuvieran que pagar todo. Cuando estaba leyendo la parte mas terrorífica del libro alguien le tocó el hombro y asustado el gritó de terror. Quien le había tocado el hombro era Diana, su novia quien también trabajaba en la biblioteca, Dylan la había conocido hace unos meses cuando la chica se había mudado a la ciudad y había comenzado a trabajar en la biblioteca. Los dos habían comenzado a salir a escondidas de Max y sus amigos ya que sabía que si se enteraban iban a querer que fueran todos juntos y Diana no quería que nadie la conociese, era normal, si eres amigo de un personaje publico tu te conviertes en uno. Diana era una chica tímida, su cabello era color marrón, siempre llevaba una trenza como Elsa de Frozen a su lado derecho, sus ojos eran color miel super brillantes.

Dylan: ¡Diana, me has asustado!

Diana: Lo siento Dylan, pero sabía que te asustarías y no podía contenerme

Dylan: No seas mala...

Diana: Es tarde, deberíamos de volver ya a casa ¿no crees?

Dylan: Tal vez tengas razón...

Diana: Siempre la tengo peluchito

Dylan: ¿No te apetece que vayamos a comer algo antes? Hay una pizzeria cerca de aquí

Diana: No estaría mal, me muero de hambre

Dylan: Pues venga, te invito a una pizza barbacoa

Diana: Ñam... mi favorita

Los dos chicos salieron de la biblioteca y cerraron con llave, la pizzeria se encontraba cerca de ellos, allí trabajaba su amiga Ariana (A la que le llamaban la Pequeña) como repartidora hasta hace poco, ahora le habían ascendido a cocinera por que había demostrado sus grandes dotes culinarios. 

Mientras Dylan y Diana iban de camino a la pizzeria se encontraron con Laura y Nati, quienes estaban discutiendo (como siempre) en mitad de la calle, se seguian queriendo pero no estaban juntas por que sabian que eran hermanas legalmente ya que Evie Meldler, la madrastra de Laura era la verdadera madre de Nati.

Nati: ¡Ya te he dicho que no!

Laura: Eres una persona demasiado infantil Natalia, te dejas llevar por las opiniones exteriores

Nati: Ya te he dicho que si mi madre es tu madrastra somos hermanas, no podemos estar juntas ¿no lo entiendes?

Laura: No somos hermanas realmente, es solo un titulo... conmemorativo pero nada mas

Nati: Y yo te he dicho que no voy a hacer incesto, en nuestro país no es legal ¿recuerdas?

Laura: ¡Que no es incesto! ¡No somos hermanas!

Dylan: ¡Bueno, ya esta bien!

Dylan se interpuso en la pelea y se acercó junto a Diana a sus dos amigas

Dylan: No es incesto, Laura tiene razón, pero Laura deberías de respetar la opinión de Nati, si te ha dicho que no es que no, estas teniendo comportamientos iguales que los de los machistas

Diana: Dylan, cariño, si es incesto, al menos legalmente, pero si se quieren de verdad no entiendo a que viene que ahora corten por eso

Nati: Diana no quiero liarme con mi hermana

Laura: Que no soy tu hermana

Nati: Si lo eres 

Diana: No lo es

Dylan: Si lo es

Laura: ¡Ya esta bien! Dejemos de pelear por esto, me muero de hambre... 

Dylan: Nosotros íbamos a ir a comer una pizza a la pizzeria de Ariana Pequeña ¿Os venis?

Laura: Cuenta conmigo, me muero de hambre... ¿tu vienes Nat?

Nati: Supongo... 

Diana: Pues dicho todo esto.. ¡Vamos!
Los cuatro comenzaron a caminar hacía la pizzeria bastante hambrientos, Dylan tenia claro una cosa, iba a intentar que esas dos volvieran, ya suficiente drama había entre su hermano y Jack como para que ahora estas dos también cortasen por una tontería, Dylan ahora creía mas en el amor que antes y no iba a dejar que se quitasen las flechas que Cupido había clavado en ellas.