Un amor de fama

Capítulo 27 - Sorpresas y desilusiones

Días después. Era viernes.

Narra Ross:

Me levante y fui a desayunar a la casa de Laura, como siempre. Nina seguramente estaba en su departamento todavía durmiendo. Así que la dejaba que descanse. Me subí al auto y arranque. En el camino venia escuchando mi música que justo la estaban pasando, la canción era “Loud”, la amaba. En cuando paro en un semáforo que estaba en rojo, me suena el celular. Entonces atiendo sin mirar quien me llamaba.

Llamada telefónica.

Ross: Hola. ¿Quién habla?

Dan: Hola Ross, soy Dan.

Ross: Ah hola Dan. Ya estoy yendo para tu casa.

Dan: No, no vengas.

Ross: ¿Por?

Dan: Hoy no grabaremos por el cumple de mi hija.

Ross: Ah, no sabía nada.

Dan: Si, fue a último momento. Disculpa.

Ross: No, todo bien. Igual voy a desayunar, si no molesto.

Dan: No molestas, podes venir si querés.

Ross: Ok. Ya llego.

Dan: Está bien. Adiós.

Ross: Adiós – corte.

Fin de llamada telefónica.

Menos mal que no grababa, así pasaba más tiempo con mi hermosa cumpleañera. Tenía que comprarle algo, además de la sorpresa que le tengo preparada, gracias  a Nina por ayudarme en todo. La idea que tuvo, es genial. Ya van a ver que es.

Narra Laura:

¡Hoy! ¡Llego el día! ¡Mi cumpleaños! ¡Ya tengo 18 años! Wow. Como pasa el tiempo. No lo puedo creer. Esta noche será inolvidable. No me interesan mucho los regalos, lo más me importa, es que estén todos los que quiero junto conmigo, festejando mi día especial. Me levante muy feliz. Enseguida me conecte al facebook para ver los mensajes. Tenía uno de Raini, otro de Cody, de Calum, de Grace, algunos de mis familiares y amigos que no veo hace un montón. Pero el primero de todos era de Ross Lynch, decía: “Feliz cumple Laura. Te deseo lo mejor del mundo. Espero que se te cumplan todos tus deseos. Nos vemos hoy. Te amo hermosa. Sos todo para mí, sábelo”. Aawww era muy tierno. Les puse a todos “Gracias. Los amo” y apague la maquina.

Baje a desayunar, ya tenía un hambre que no daba más. En cuando estoy bajando, vi que estaba todo apagado, oscuro. No había nadie, que raro. Voy hacia el comedor para prender la luz. La prendo y salen mis padres, mi hermana y Ross detrás de los muebles, gritándome “Sorpresa. Feliz cumple Laura”. Además, mi mamá caminando hacia mí con una torta en la mano.

Emma: Pedí tres deseos hija – prendiéndome una vela de color violeta, mi favorito. Hice lo que me dijo mi mamá. Cerré un momento los ojos y pedí mis tres deseos y luego sople las velitas. No se los puedo decir, si no, no se cumplen. Todos me aplaudieron y cada uno me dio un abrazo.

Ross: Feliz cumple – abrazándome fuerte – Te amo – susurrándome en el oído. Yo sonreí ante el comentario.

Laura: Gracias Ross – sonriéndole – Gracias familia – sin parar de sonreír.

Vanessa: Toma – dándome una caja mediana, color roja con un moño turquesa – Tu regalo. ¡Ábrelo!

Laura: No hacía falta hermana – agarrándolo y abriendo despacio la caja. Era unos zapatos para el verano, divinos. Color negro con pintitas blancas. Taco alto, chino – ¡Aahh, gracias! – abrazándola.