Hay mil cosas en la vida que no se pueden elegir: la familia en la que naces, el barrio en el que creces, tus vecinos, tus compañeros de clase, enamorarse... Joder, enamorarse... esa palabra que hasta hace 9 años no tenía ningun sentido, aquello que siempre decía: "¿Enamorarme yo? ¿Pero sois conscientes de lo que estáis hablando?"
Con el tiempo me di cuenta de que sí, todos eran plenamente conscientes de lo que decían. Pero tuviste que llegar tú a ponerlo todo patas arriba para darme cuenta de lo que era el amor y enamorarme.
Desde el primer día me hiciste sentir la persona más especial del mundo a tu lado Ana, me mirabas con una mezcla de ternura y pasión a la que sigue siendo imposible resistirse, pero no me enamoré de ti por eso.
Me enamoré de ti porque a pesar de estar contigo siempre me sentí libre, porque me hiciste sentir que juntas eramos aún mas fuertes que por separado, que podíamos con todo por muy feas que se pusieran las cosas, confiabas en mi más que yo y me hiciste crecer y creer en mí como nunca lo había hecho. Por primera vez en mi vida comprobaba de primera mano lo que se sentía cuando alguien te quería mucho y bien. Y no me quería ir de tu lado nunca, no me quiero ir de tu lado nunca.
No fueron pocas las veces que nuestros amigos nos preguntaron en qué momento nos enamoramos una de otra. Tu siempre cuentas la misma historia y con eso suelen darse por contentos: " Me di cuenta de que me había enamorado de Miriam el día después de que Aitana celebrara sus 21. Ya llevábamos viéndonos un año y hacía 8 meses que habíamos decidido formalizar nuestra relación. Esa noche nos fuimos juntas de la fiesta a su casa, a la mañana siguiente yo me desperté antes que ella y como eso no suele pasar a menudo me quedé un rato mirándola en silencio, pero ese día fue diferente a otros. Esa mañana me di cuenta de que aquella chica rubia que dormía casi desnuda en mi cama era la chica con la que quería irme a dormir todas las noches y lo primero que quería ver al despertar"
Hoy antes de dormir me recordaste esa historia y me preguntaste que en qué momento yo me di cuenta de que estaba enamorada de ti, que nunca te lo había contado.
Ana, yo me di cuenta de que me había enamorado de ti la noche de Benijo. ¿Te acuerdas?
Junio, 2020
-Ana venga levántate que vamos a perder el avión. -Miriam zarandeaba levemente a su novia mientras la canaria se revolvía entre las sábanas maldiciendo el día que se le ocurrió reservar un vuelo a las 7:30 de la mañana destino Tenerife.
-Miri 5 minutos mas porfa, ¿qué hora es? -Ana cubría su cabeza con el nórdico para que la luz que Miriam había encendido para intentar despertarla
-Las 5, en una hora tenemos que estar saliendo de casa, asique venga, levanta ese culo tan precioso que tienes de la cama. -Resolvía Miriam mientras esbozaba una sonrisa.
-Mhmm vale ya voy. -La morena estiraba sus brazos con la intención de que la gallega la ayudara a levantarse, o eso pensó Miriam, porque las intenciones de Ana eran otras, y tiró con fuerza de la rubia hasta que ésta quedo encima de ella.
-Ana, enserio, cuando lleguemos al hotel te juro que te hago lo que quieras, pero espabila que no llegamos. -Miriam se deshizo del agarre y salió de la habitación sacando las maletas mientras la canaria comenzaba a vestirse.
Una hora después ambas se subían al taxi que las llevaría al aeropuerto destino Tenerife. Ana había decidido que el primer viaje que quería hacer con Miriam era ese porque quería enseñarle los rincones en los que había crecido, y la gallega, que era incapaz de negarle algo a su novia, sumado a la ilusión que le hacía que Ana quisiera compartir con ella esa parte de su vida aceptó de buen grado.
La canaria lo había preparado todo a conciencia: Se quedarían en un hotel cercano a la playa de Benijo, su playa favorita. Estaba a una hora de La Laguna y durante todos los veranos hasta que se fue de Tenerife su familia y ella se iban a una casa que tenían cerca de esa playa. A Ana le traía recuerdos muy felices y nada le apetecía mas que crear recuerdos nuevos en su playa, con Miriam.
