𝘚𝘰𝘭𝘰 𝘶𝘯 𝘱𝘰𝘤𝘰 𝘚𝘪𝘯𝘷𝘦𝘳𝘨𝘶̈𝘦𝘯𝘻𝘢 | 𝐓𝐫𝐮𝐞𝐩𝐥𝐢𝐤 𝐀𝐝𝐚𝐩𝐭

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—Buenos días —dijo Manuel, sorbiendo su café.

Ya estaba vestido para el trabajo, con un par de pantalones grises y una camisa blanca que lucía obscenamente bien contra su piel bronceada.

Mateo apartó los ojos y se sentó a la mesa.

—Buenos días —dijo, tratando de actuar de manera normal.

Le había prometido a Manuel que no se haría ilusiones y no quería ser un mentiroso.

Ellos habían follado. Manuel lo había follado.

A la luz del día, parecía surrealista. Si no estuviera un poco dolorido, pensaría que todo había sido un sueño.

—Llegaré a casa tarde esta noche —dijo Manuel.

Los ojos de Mateo se lanzaron hacia él.

—¿Por qué?

Manuel hizo una mueca leve.

—Tengo una cita con Luke Whitford.

Mateo sintió que se le encogía el estómago.

—¿Ya? —dijo débilmente—. Eso fue rápido.

—Mi primo James lo arregló, en realidad—Manuel tomó otro sorbo de su taza—. Él es el mejor amigo de Luke. Ni siquiera tuve que pedirle que lo hiciera. Aparentemente, James cree que Luke necesita una distracción después de su secuestro.

—Extraño —murmuró Mateo—. Aceptar una cita justo un mes después de una experiencia tan traumática.

Manuel asintió.

—Parece un poco extraño.

—¿Podría ser una trampa?

—Improbable. James es un tipo agradable, uno de mis mejores parientes, en realidad. Él parece genuinamente preocupado por su amigo. Estoy empezando a pensar que está esperando que despeje la mente de Luke de algo o de alguien.

Mateo lo miró con curiosidad.

—¿Qué quieres decir?

Manuel se encogió de hombros.

—Es solo una corazonada. Podría estar equivocado.

—¡Vamos, cuéntamelo de todos modos! —dijo Mateo, poniéndole a Manuel sus mejores ojos de cachorro.

Estaba un poco sorprendido de lo fácil que era actuar normal, burlarse de Manuel y ser un mocoso. No sentía nada diferente por Manuel ahora que habían follado, tal vez un poco más consciente de él físicamente, pero como siempre había sido extremadamente consciente del cuerpo de Manuel, no era nada inusual. Mateo estaba seguro de que era una buena señal de que nada había cambiado para él.

No puedes caer más bajo si ya estás en el fondo, dijo una voz vacilante en el fondo de su mente.

Mateo la ignoró.

Manuel suspiró, pareciendo sufrido pero cariñoso.

—Luke Whitford tiene a alguien. Parece tener cierta debilidad por los imbéciles, especialmente cuando son altos, morenos y mayores que él. Si realmente fue secuestrado por Roman Demidov, no sería imposible que haya desarrollado algún sentimiento por Demidov. El ruso se ajusta al tipo de Luke.

Tú también, pensó Mateo tristemente. En voz alta, dijo:

—¿Pensé que Luke estaba buscando una relación seria y comprometida?

Manuel lo miró por encima del borde de su taza.

—No es exactamente raro pensar con la polla en el calor del momento y hacer cosas que no deberías hacer.