HAYLEY: CAZADORA DE DEMONIOS (terminada)

Capítulo 30

- ¿estas lista? - insistió Josie por trigésima vez, todos en la casa me había preguntado sobre si estaba segura o si estaba lista. A este punto ya me había cansado de tener que decir "si" tantas veces.

- si me siguen preguntando voy a golpear a alguien. - bufé mientras ella seguía amarrado mis manos tras la espalda. - se que el secuestro tiene que parecer real... Pero no quiero que me amputen las manos por la falta de circulación - bromee. Aunque no del todo, porque su amarre estaba muy apretado, tanto que si tardabamos más de quince minutos no lograría sentir mis manos.

- lo siento - dijo soltando un poco más la cuerda. Gracias a dios.

- ¿lista? - pregunto Scott cuando llegó frente a mi. Gruñi ante su pregunta y le lance una patada en la pantorrilla. Siempre cumplo mi palabra. - Auch ¿y eso porque fue? - se quejó.

- es mejor que nos vayamos, en treinta minutos será media noche - informó Geneviève interrumpiendonos antes de que pudiera contestar.

- vale- dijo Josie a su prima. Nuestra prima. Mierda, aún no me acostumbraba a eso. Se que también son mi familia, pero seguía siendo raro hacia los demás, porque con Josie era algo natural referirme a ella como prima.

Los demás cargaron las pocas armas que nos quedaban en tiempo récord y salieron de casa antes que Scott y yo, tuvimos que robar el auto de una persona para que todo pareciera real. No estaba nada orgullosa de eso, pero era necesario.
Esperamos un poco solo para darles más ventaja a los demás y después nos pusimos en marcha hacia los antiguos muelles.

- si nos traicionas esta noche, no voy a esperar a que Doom te asesine, porque lo haré yo misma. - sentencie à Scott desde el asiento trasero.

- no lo haré - prometió alzando su mano derecha como si fuera un Boy scout. Más le vale. - no volveré a hacer algo que te ponga en peligro - dijo mirándome con el espejo. Alcé una ceja irónicamente, puesto que lo que estamos haciendo es justamente algo peligroso para mi persona. - además de esto - agregó como si leyera mis pensamientos.

Cuando llegamos a los muelles nos detuvimos en la entrada para no llamar la atención tan rápido. Al bajar Scott me ayudó ya que yo no podía sola por culpa de mis manos atadas tras la espalda.

- bien. Estoy lista - dije preparandome para el siguiente paso del plan... Paso que le omití a Doom, y a todos los demás por ciertas razones.

- te va a doler un poco - dijo haciendo una mueca como si le doliera a él antes que a mi, asentí y cerré los ojos con fuerza apretando los labios en una linea preparándome para lo siguiente.
Scott me soltó una fuerte bofetada, que me dolió hasta el alma,- ¡mierda! - gruñi más como un grito de queja. Tiene la mano muy pesada o yo la cara muy sensible. toda la parte izquierda de mi cara comenzó a arder y a sentirse caliente por el reciente golpe, después de unos segundos para asimilar el fuerte golpe comencé a sentir un sabor metálico en la boca.

- me rompiste el labio idiota - gruñi al sentir el dolor palpitante en el labio inferior - y estoy casi segura que dejaste una gran marca en mi cara - dije lanzandole una mirada asesina.

- fue tu idea - dijo alzando ambas manos. Tenía razón. Había sido mi idea. El amo oscuro jamás se creería que pudo sacarme de la casa sin antes haber luchado. Suspire profundo aguantandome el ardor creciente en mi rostro.

- lo sé - dije soltando un suspiro.-pero à la próxima seré yo quien de él golpe.

- de verdad lo siento hayley...

- esta bien - dije interrumpiendolo, era verdad que yo había sido la idiota que había ideado un plan así.

- me refería a que siento tanto mi comportamiento, no debí hacer muchas cosas y de verdad lo siento mucho, ¿crees que podrás perdonarme?- dijo, sabía que lo decía sinceramente, lo veía en sus ojos. El quería ayudar y quería ser perdonado pero mi orgullo me impedía decirle que lo perdonaba. Aunque por dentro ya lo había hecho.