Me encuentro dentro de las ruinas de un centro comercial. Los cristales cubrían una gran parte de la estructura, los cuales habían hecho ceder parte del techo, pero ya dentro, este, al caer, se apoyó sobre ellos. Las enredaderas crecían por todos lados, de entre los mosaicos del suelo hace años que empezó a crecer la maleza, que ya estaba bastante alta. De los agujeros del techo caían cascadas de luz, que bañaban todo el lugar. Alrededor de mí había cientos de cadáveres tirados en el piso, mis víctimas. Había varios desmembrados, otros atravesados por cristales, y algunos pocos apenas eran bolas de carne, sangre y huesos en las cuales no podías distinguir si alguna vez fueron humanos.
Me duele todo el cuerpo y apenas puedo caminar. Avanzo tambaleándome entre los cadáveres. Con cada paso que doy siento como si mis piernas se fueran a romper. Mi cabeza da vueltas y apenas sé que estoy de pie. Tropiezo con un cadáver del piso y me caigo. Choco la cabeza contra el suelo, y siento como si se clavaran cientos de agujas en mi cerebro. Me arrastro a duras penas para poder recostarme contra una pared. Cierro los ojos y respiro hondo. Esto alivia un poco el mareo. Abro los ojos otra vez y miro hacia el frente. Veo mi reflejo en los restos de lo que fue el escaparate de una tienda. Lo que veo me eriza la piel. Parezco un monstruo, apenas quedan vestigios de mi antiguo yo. Donde solía estar mi brazo, tengo una especie de garra de cristales, bastante grande, más que mi brazo original, teñida por el rojo de la sangre ajena. Mis ojos son rojos y emiten un extraño brillo. El brillo de la locura. Mi ropa está hecha jirones y llena de hoyos de balas, de los cuales salen gotas de sangre ya seca. Mi ojo derecho está rodeado por cristales, los cuales forman una estela hasta casi llegar a mi oreja. Todo mi cuerpo se encuentra salpicado de cristales, de todos los tamaños.
Y en ese momento, contemplando mi estado, simplemente empiezo a reírme. Me rio sin razón alguna, a carcajadas, sin poder aguantarme. Pero de repente mi risa se ve interrumpida por otra oleada de dolor. Grito de dolor. El mareo aumenta, y la luz en mi cabeza se apaga.
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Heartless
Science FictionUn chico de 16 años, viviendo una vida normal después de una tragedia mundial, se ve envuelto en las acciones de una organización secreta, gracias a la cual va descubriendo que su pasado está enlazado a este acontecimiento más de lo que puede podría...