"El Terminator T-800 de "Terminator: Dark Fate" es un asesino cyborg, enviado en el tiempo desde un futuro post-apocalíptico. Es casi indestructible y posee una tecnología superior, habilidades de combate e inteligencia artificial que lo convierten en la mejor máquina de matar."
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The Terminator (conocida en Hispanoamérica como Terminator o El Exterminador) es una película estadounidense de ciencia ficción y acción de 1984, dirigida por James Cameron, coescrita entre Cameron, Gale Anne Hurd y William Wisher Jr. y protagonizada por Arnold Schwarzenegger, Linda Hamilton y Michael Biehn.
El filme fue producido por Hemdale Film Corporation y distribuido por Orion Pictures. En ella Schwarzenegger interpreta al Terminator, un ciborg asesino enviado a través del tiempo desde el año 2029 a 1984 para asesinar a Sarah Connor, interpretada por Linda Hamilton. Kyle Reese, interpretado por Michael Biehn, es un soldado también enviado desde el futuro con la misión de proteger a Sarah. La película fue estrenada el 20 de octubre de 1984.
La historia está basada en varios relatos e ideas de Harlan Ellison, quien no fue acreditado en la película hasta muchos años más tarde. La forma de Terminator, el cyborg asesino, está basada en diferentes pesadillas que Cameron tuvo estando enfermo, participando luego en la idea con varios storyboards.
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Cameron pensó originalmente en el Terminator como un ser indestructible, pero que, a la vez, es capaz de ocultarse fácilmente. Como resultado, su primera elección para el papel fue Lance Henriksen. O.J. Simpson estaba en la lista, pero Cameron, que no creía que "el chico fuese un despiadado asesino" lo descartó. El nombre de Sylvester Stallone apareció como otra opción. De acuerdo con él y co-escritor William Wisher, a Schwarzenegger se le ofreció el papel de Kyle Reese. Sin embargo, se dieron cuenta de que él se adaptaba mejor al papel de Terminator, que como consecuencia se convirtió en grande y musculado. Michael Biehn también estaba en la lista para el Terminator, y no para el héroe Kyle Reese.
La película supuso toda una revolución por sus efectos especiales innovadores para la época y el diseño del cyborg. El diseño del endoesqueleto de Terminator fue realizado en metal y necesitó de un mando a distancia para poder controlarlo. En las escenas que se ve al robot de cuerpo entero, éste estaba animado mediante la técnica de stop-motion.
La producción estaba prevista que se iniciase para el verano de 1983 en Toronto, pero después de que Dino de Laurentis eligió a Schwarzenegger para la película Conan el Destructor, la filmación se retrasó hasta marzo de 1984 en Los Ángeles. Luego el filme fue filmado de marzo a mayo de 1984 en esa misma ciudad.
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Varias escenas cortadas de la película están disponibles en algunos DVD. Una escena en particular que implica la destrucción de Cyberdyne inspiró una trama muy similar para la secuela. En esta escena, Reese sugiere a Sarah que encuentren Cyberdyne Systems y que lo destruyan antes de que puedan inventar Skynet, previniendo la guerra. Al final de la película, cuando Sarah está siendo llevada por la ambulancia, dos trabajadores de la fábrica encuentran los restos del Terminator y deciden llevarlo a Investigación y Desarrollo, con la cámara reduciendo el zum se revela el nombre de la fábrica: Cyberdyne Systems. Estas dos escenas establecen los puntos principales del argumento de Terminator 2: el juicio final.
El Terminator "protector" comunica a Sarah y a John que han logrado recuperar la CPU y un brazo cuando acaban con él (el propio Terminator) la primera vez, y que utilizando ingeniería inversa sobre la CPU y el brazo de Terminator en el futuro, se consigue crear Skynet, por lo que Sarah, John y Terminator deciden volar Cyberdyne para evitar la guerra.
James Cameron dijo una vez que lo que le inspiró para hacer Terminator fueron dos episodios de la década de 1960, de la serie de televisión de ciencia ficción The Outer Limits (en España: Más allá del límite; en Latinoamérica: Rumbo a lo desconocido): «Soldado» y «El demonio con la mano de cristal». Ambos episodios estaban escritos por el autor de ciencia-ficción Harlan Ellison, quien demandó al estudio para que en la película original se reconociera su aporte, que también debe incluirse en todas las futuras versiones de la película.
