Harry y yo no somos nada- Larry Stylinson (OS)

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El entrevistador comenzó a hablar, preguntas aquí y preguntas allá, pero Harry no estaba concentrado en ellas, apenas si las escuchaba, su mente estaba en otro lugar y en otro momento. Solo cuando oyó la voz de Louis reaccionó y giró la cabeza para escucharlo mejor. Comenzó a preguntarse cómo era posible que todo hubiese cambiado tanto en tan poco tiempo. ¿Él era diferente? La respuesta era simple: No. Harry Styles seguía siendo el mismo de siempre, algo más maduro, pero el mismo Harry.

Louis era quien había cambiado, se había alejado y ni siquiera había sido capaz de detenerlo. Eran cambios leves, como no sonreír cuando Harry decía una broma o no tomarlo de la cintura cuando se tomaban una foto, cosas casi imperceptibles que terminaron convirtiéndose en un gran abismo.

Antes todo estaba bien, bromeaban y se reían, eran inseparables y sus formas de coquetear aunque fueran falsas eran famosas en todo el mundo. La pareja de chicos que no eran pareja. A Harry le gustaba que fuese así, le gustaba jugar con Larry Stylinson, y según parecía que a Louis también. De eso ya había pasado un tiempo. Varios meses, y ahora todo era diferente.

—A pesar de lo distanciados que se ven Harry y tú, las fans siguen aclamando que estén juntos. ¿Qué piensas de eso? —Le preguntó el entrevistador directamente a Louis sin siquiera reparar en cómo aquella pregunta había logrado afectarle a él más de lo normal.

Había tenido que aprender a disimular cuando ese tema salía a colación. No creía que fuera demasiado bueno en eso.

—Es gracioso, no se porque piensan eso. Harry y yo no somos nada.

Esas últimas palabras, "no somos nada", retumbaron en la cabeza de Harry una y otra vez. No significaban solo que no eran pareja, significaban que entre ellos no había ninguna relación. Por supuesto que las fans no se lo tomarían así, pero Harry conocía a su ex amigo y dolía. Dolía demasiado ver como Louis se le escapaba de las manos.

El quería volver el tiempo atrás, recuperar la amistad de Louis aunque fuese solo eso, amistad. Le importaba un demonio si jamás podía confesarle cuán rápido su corazón latía cuando él estaba cerca. De todas formas, el rostro de repulsión de Louis cada vez que "Larry" salía a colación, le bastaba para entender que sería mejor confesarle nunca nada.

Había momentos, si. Estaban esos breves segundos en los que ambos olvidaban que se habían distanciado y comenzaban a mirarse y a reírse como antes. Cuando ganaban un premio todo cambiaba, la emoción del momento más el alcohol traían la vieja amistad, Louis se comportaba como el viejo Louis y abrazaba a Harry con todas sus fuerzas, enterrando la nariz en su cuello.

Para él esos eran momentos invaluables. Cada vez que sucedían los guardaba en lo profundo de su memoria para recordarlos cuando se sintiese solo.

Luego de la forma fría con la que Louis le había respondido al entrevistador, las preguntas siguieron y finalmente para alegría de Harry acabaron. No habló con nadie, no bromeó y ni siquiera miró a alguno de los chicos a los ojos. Ya era costumbre que para disfrazar su dolor intentase lucir alegre, pero no podía, le hacía daño ver a Louis y recordar todas esas veces que se había alejado de él para no tocarlo o rozarle siquiera, esas miradas evadidas como si le diese asco que se los relacionase, esos besos que compartía con Eleanor enfrente suyo.

—Harry, ¿te sientes bien? —La pregunta de Niall lo hizo dejar de mirar por la ventana de la limusina para poder prestarle atención a su amigo.

Louis giró su cabeza cuando escuchó que nombraban a su compañero y se quedó unos minutos prestando atención a la conversación.

—Mmm...si, me duele algo la cabeza.

—Tengo una aspirina en mi habitación, puedo dártela, si quieres...—La voz suave de Louis logró sorprenderlo. Casi nunca le dirigía la palabra, salvo que fuera estrictamente necesario.