One Shots - Chriserick

La Paciencia de un Artista

"¿Erick? ¿Estás bien allí?" Una pausa indeseable se hizo presente al otro lado de las puertas. Con o sin la necesidad de hacerlo, Christopher Vélez golpeó suavemente su puño contra el panel negro que rodeaba las vidrieras blancas y verdes. "No tienes nada de qué avergonzarte. Solo estoy yo aquí".

Si no fuera por la sombra que se paseaba de un lado a otro a través del diseño de vidrio coloreado, el chico castaño habría creído que estaba hablando solo. "¿No confías en mí?"

"No es cuestión de confianza". La sombra dejó de moverse y la dulce voz de Erick Colón resonó desde el baño privado. "No creo que pueda hacer esto.  T-t-tú eres un artista muy talentoso, pero no tengo nada que ofrecerte ... al menos no para esta tarea".

El puño de Christopher contra la puerta se relajó y dejó su palma abierta. Sin mostrar su verdadero grado de impaciencia o su deseo más profundo, el estudiante universitario bajó la voz a un tono que se describió como calmante. "¿Puedo al menos ver y ser el juez?"

Un chillido de pánico respondió de inmediato a la solicitud. "¡Eso desafía el propósito!"

"Erick", la misma palma abierta acariciaba lentamente la madera negra. Fantasías, tanto oscuras como claras, temblaban en las puntas de las uñas limpias de Christopher, y una rica pasión melancólica gritaba silenciosamente desde el fondo de su ser. "Erick, por favor. ¿Qué te hizo cambiar de opinión? ¿Es algo que hice?

 Si Erick pudiera ver la chispa sensual en los ojos de Christopher o la forma pecaminosa en que seguía lamiéndose los labios, entonces tal vez el hombre más joven hubiera cambiado sus siguientes palabras de manera diferente. "Por supuesto que no hiciste nada malo. Yo simplemente ya no estoy ... cómodo con esta idea. Pensé que sí, pero ahora que estoy aquí... es vergonzoso".

Los ojos color miel se entrecerraron una vez que la sombra reanudó su ritmo y volvió a caminar, rápido Erick se inquieta y empieza a nuevmanete cubrir su hermoso cuerpo desnudo. Para mantener el control de su agotador papel de amigo simpático, Christopher presionó su mano libre contra la pared pintada de color crema que rodeaba la lujosa entrada del baño. Desde su posición giró de la manija levemente y Christopher podía decir que la puerta estaba abierta. Este pequeño conocimiento, más el hecho de que su premio final se encontraba dentro de la habitación por voluntad propia, permitió que la lujuria, el poder y el control florecieran dentro de su interior.

"Es demasiado tarde para preguntarle a alguien más. Si no entrego esta tarea, obtendré una mala calificación". La lujuria, el poder y el control se enmascararon visual y audiblemente bajo el disfraz efectivo de preocupación, humildad y angustia. Tales ingredientes siempre cocinaban una fuerte agitación emocional dentro de su querido amigo de la infancia. "No quiero hacerte sentir incómodo..." Christopher dejó intencionalmente su frase inacabada en el aire. "No tienes nada de qué avergonzarte. Soy un artista y ambos somos adultos. Por favor, Erick, haz esto por mí". El golpe final de las manipulaciones ceremoniosamente esperó a través de una pausa impregnada. "Me encanta estudiar leyes. De verdad, pero estas clases de arte nocturnas adicionales que tomo me ayudan a sentirme tranquilo y libre... ¿ Recuerdas cuando tu madre me compró mi primer cuaderno de bocetos para mi séptimo cumpleaños?" La sombra dejó de caminar y se formó una sonrisa arrogante. "Desde entonces, el arte me ha hecho sentir especial".

"Era un libro para colorear y yo también tuve uno". Respondió

La sonrisa arrogante se convirtió en una sonrisa genuina. "Llámalo como quieras, pero desarrollé y dominé mis habilidades para colorear en ese libro. Sin embargo, digamos que el acto de colorear entre líneas resultó ser un gran desafío".