Después del primer beso [Thorki]

Capítulo VI

ꟷ Todos de pie para recibir a su Señoría: el juez Richard Carlson.

Los presentes en la sala siguieron la orden y todos se levantaron para recibir al anciano juez, que a paso lento tomó su lugar en el pedestal.

Thor apretó los labios con nerviosismo. Era un secreto a voces que ese hombre siempre tomaba las decisiones más inesperadas y muchas veces no era imparcial a la hora de dar su veredicto. Todos esperaban que el longevo abogado pronto jubilara, pero parecía que este no abandonaría si trabajo hasta que la misma muerte lo llevara.

ꟷ Tomen asiento.

El rubio miró a su cliente, Nadia, una madre de cuarenta ocho años culpada por matar a su propia hija con esquizofrenia y demandaba por la familia de su exesposo que, aparentemente, harían todo para meterla tras las rejas. Eventualmente la mujer había confesado matar a su hija, pero había actuado por legítima defensa.

Para probarlo había juntado testigos y preparado su interrogatorio con preguntas sencillas, pero iban directo al grano ya que lo único que quería era confirmar el estado de la hija de la señora Nadia. Thor tenía fe en sí mismo y esperaba poder ayudar a la mujer.

ꟷ Señor juez, le presento el caso del estado en contra de señora Nadia Haraldsen por homicidio.

ꟷ Declaro abierta esta audiencia. -habló el juez, golpeando una pequeña plataforma de madera con su mazo-. Por parte de la fiscalía ¿Quién procede?

ꟷ Andreas Gormsson, fiscal adscrito al presente caso.

ꟷ ¿Y de la defensa?

ꟷ Thor Odinson, defensor de la señora Nadia Haraldsen.

Tras presentarse, los abogados fueron invitados por el juez a presentar el alegato de apertura, en el cual resumirían su postura e introducirían a los participantes de la audiencia a los distintos puntos de vista del caso.

El fiscal fue el primero en pasar a exponer sus pruebas, llamando a una vecina a declarar lo que había presenciado en aquel día.

ꟷ ¿Cómo describiría usted a la hija de la señora Nadia?

ꟷ Bueno, no se podía tener una conversación con ella... Era agresiva y sufría repentinos cambios de humor. Se decía que tenía esquizofrenia.

ꟷ ¿Sabía usted si estaba con algún tipo de tratamiento? -preguntó el fiscal bajo la atenta mirada del rubio abogado.

ꟷ Bueno, mi vecina comentó que un médico le había dado unas pastillas para que la chica estuviera más calmada. Pero que estos medicamentos ya no le estaban haciendo el efecto que se esperaba, así que le daba un poco más para que pudiera tranquilizarse.

ꟷ O sea, aumentó la dosis.

ꟷ Sí, para que le hicieran efecto porque ella decía que ya no le estaban haciendo nada.

ꟷ Pero no le dijo el doctor que le dieran más pastillas a la niña ¿O sí?

ꟷ Objeción señoría, la pregunta es sugestiva. -dijo Thor, alzando la voz para interrumpir la posible respuesta que la vecina podría darle al fiscal.

ꟷ A lugar.

Thor suspiró y jugó con el lápiz que tenía entre sus dedos, escuchando la última parte del interrogatorio por parte del fiscal. Cuando fue su turno, se puso de pie y arreglando su saco caminó hacia la testigo para preguntar:

ꟷ Usted nos dijo que la chica estaba enferma ¿No?

ꟷ Sí.

ꟷ Dígame, ¿Qué ocurría cuando no amarraban o medicaban a la hija de la señora Nadia?