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— Déjame ver.

Jeongguk dobla su cabeza hacia la derecha, permitiendo que Jimin vea el moretón en su mejilla.

— Vaya, aunque se ven mejor que Jimin cuando estaba en secundaria. — Dice Wonho levantando una ceja, llevándose unas papas a la boca. — Probablemente este chico los vio besarse antes y se le subió la testosterona.

— Es cierto. — Dice el más pequeño a su lado. — Yo parecía un saco de boxeo cuando salí de una presentación de ballet en la escuela. — Ríe.

— Yugyeom de verdad salió de la nada. — Dice sorprendido Jeongguk dando un sorbo a su refresco. — Fue una locura.

— Pero Taehyung, tú sí le diste un golpe ¿Cierto? — Pregunta emocionado Jimin.

— No quería pegarle, quería quitarlo de encima de Kook pero luego no me soltaba.

— Wow Taehyung, muy valiente. — Le dice Wonho sonriendo.

Jeongguk apreta sus manos juntas debajo de la mesa.

— ¿Cómo era para ti, Wonho? Apuesto que nadie se metía contigo. — Pregunta el menor sonriendo.

— La secundaria fue hace mucho tiempo para mí. — Ríe. — Pero cuando estaba ahí no era tan grande y musculoso como ahora, si eso es lo que preguntas. — Cruza sus brazos aún sonriendo. — Muchos se metían conmigo, me dijeron mil veces que me iría al infierno, que me moriría de sida, esas cosas de bravucones sin cerebro. — Wonho apoya sus brazos en la mesa viendo directamente a Jeongguk. — Pero yo nunca les quitaba la mirada, y les decía "Así es, soy un maldito maricón". — Jimin estalla en risas seguido por Taehyung y Jeongguk. — Si me iban a golpear pues que lo hicieran, estoy seguro de que yo era un buen contrincante.

— Si le pegaste al chico ese... Yugyeom, seguramente se empiecen a meter más con ustedes. — Dice Jimin mirándolos. — La primera vez que me pegaron al otro día ya habían miles de dibujos de penes en mi mesa del salón, no sé porque intentaron ofenderme con eso, si a mi me encantan. — Ríe.

— Ustedes realmente saben cómo hacer reír en momentos así ¿No? — Pregunta sonriendo Jeon.

— La idea es no deprimirse. — Levanta sus hombros Wonho. — Seas quien seas, la vida es una puta mierda y tienes que defenderte.

— En mi último año de secundaria conocí a Wonho en una competencia de baile, cuando nos hicimos amigos empezó a ir por mí a la escuela y fingía ser mi novio. — Le sonríe Jimin. — Jamás se metían conmigo si él estaba, ¿Los pueden culpar? Este chico es gigante.

— Cuando su amigo Hoseok nos contó lo que sucedió realmente queríamos hablar con ustedes cuanto antes. No están solos en esto.

— La escuela es honestamente una de las peores partes de esto, pero va mejorando, un día te despiertas y sabes que no hay nada de que avergonzarte en ti.

Ambos escuchan atentamente a los dos mayores.

•

— ¿Qué le has dicho a tu padre? — Pregunta Taehyung mientras caminan.

— Nada, que me he metido en una pelea después del partido con un chico del otro equipo.

El mayor ríe. — Pues sí era un chico del otro equipo, pero no de básquetbol.

— ¿Qué crees que él diría?

— ¿Qué?

— ¿Qué crees que mi padre diría si supiera de lo nuestro?

Taehyung suspira. — No lo sé, pero me inclino a pensar que...—

— Nada bueno. — Lo corta completando su oración. — Se me ha pasado por la mente decirle ¿Sabes?, cuando lo veo siento que sigo teniendo miedo, que no soy libre, que sigo mintiendo.

— Te entiendo, pero no sé si sea una buena idea.

— La verdad es que pienso lo mismo.