Capítulo V

4 2 1
                                    

La noche paso y era hora de despertar, el sofá no era cómodo y la espalda me dolía como nunca. Un olor peculiar me llamo la atención, era una combinación entre huevo, aceite, tocino y… creo que un olor a quemado.

- ¡Demonios!

Alguien gritaba desde la cocina, me apresure tanto como mi espalda me lo permitía. Ahí estaba, una chica frustrada, enojada y quemando toda la comida.

- ¿Qué haces, ojos bonitos?

- Yo... intente hacer el desayuno, pero… simplemente soy una inútil y no puedo.

Apague la estufa y me acerque a ella, claro dejando una distancia considerable para que no se incomode. – oye, no eres una inútil, solo que tal vez no recuerdas como cocinar aun, mira no soy una experta en la cocina, realmente no soy buena, pero Ally tal vez tenga tiempo y pueda ayudarte en esto de cocinar ¿te parece si le pregunto?

Ojos bonitos solo asintió con un puchero, es demasiado tierna.
-ahora ¿Qué te parece si vamos a comer algo? Solo si te sientes cómoda.

- ¡No! No quiero salir, eso no.
-está bien… tranquila no saldremos, nos quedaremos, pediré algo de desayunar. – tome el teléfono y llame a una cafetería que tenía servicio a domicilio, ordene unos cafés y algo de donas, aunque lo pensé mejor y también pedí una rebanada de pastel.

-bueno, ojos bonitos, en un momento llegará nuestro pedido ¿Qué quieres hacer ahora?

- No lo sé ¿Qué podemos hacer?

Así pasamos toda la mañana buscando que hacer, desde acomodar mis libros, hasta jugar videojuegos. Ally llego en la tarde y reviso a ojos bonitos de pies a cabeza, todo marchaba de maravilla, acordamos los días que Ally podría enseñarle a ojos bonitos un poco del arte que es cocinar, ya una vez llegada la noche decidimos que antes de dormir tomaríamos un libro al azar y leería un poco a ojos bonitos.

- “Mi táctica es
mirarte
aprender como sos
quererte como sos.
Mi táctica es
hablarte
y escucharte
construir con palabras
un puente indestructible.
Mi táctica es
quedarme en tu recuerdo
no sé cómo ni sé
con qué pretexto
pero quedarme en vos.
Mi táctica es
ser franco
y saber que sos franca
y que no nos vendamos
simulacros
para que entre los dos
no haya telón
ni abismos.
Mi estrategia es
en cambio
más profunda y más
simple.
Mi estrategia es
que un día cualquiera
no sé cómo ni sé
con qué pretexto
por fin me necesites.”
Mario Benedetti.

Ojos bonitos se quedó profundamente dormida. Yo disponía a marcharme cuando unas manos detuvieron mi camino.

- no te vayas, quédate esta noche a dormir conmigo.
Sus ojitos semi abiertos, su carita angelical y ese puchero… simplemente me convencieron y decidí quedarme. Supongo que no solo llego como un tesoro, sino también atrae como uno.

Golden GirlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora