Me desperté a causa del ruido que había en la casa por la mudanza, hoy es domingo, día para dejar mi casa, mis amigos y el lugar donde crecí, no quería mudar me pero a causa del dinero mi mama vendió la casa y compro una más pequeña pero alejada situada a los lados de la ciudad en un bosque que conecta la ciudad y el pueblo, aunque es pequeña es muy acogedora.
Lo triste es que me quedare sola la mayoría de tiempo, mi mama trabaja y mis amigos no me pueden acompañar siempre ya que tienen escuela y yo también, lejos de ellos.Me paré para terminar de empacar mis libros me encanta leer, ya guarde el resto solo faltan algunos.
-Samanta -gritó mi mama -ven acá un momento.
-Ya voy -le respondí bajando las escaleras.
-Hija te buscan tus amigos.
Mis amigos son Lisa Y Juan somos muy unidos desde pequeña y ahora nos tenemos que separar.
-Esta bien yo los atiendo para que sigas empacando mama -le dije para que no se atrasara.
-Bueno hija -me dijo haciéndose a un lado.
-Hola amigos -los salude enseguida que abrí -ellos entraron y me dieron un abrazo.
-Hola -dijeron tristemente abrazandome.
-No tienen que estar triste o me pondrán mal.
-Lo se -se río Lisa contagiándome.
-Hey me están olvidando -se quejó Juan.
-No, claro que no para eso nos fuéramos ido ya como tu lo hiciste cuando estábamos en la plaza para irte tras unas chicas.
-No tienes que recordar eso ya yo pedí disculpas -dijo riendo al recordar, mientras Lisa reía a carcajadas por el intento que iso esa ves no le salio nada bien ya que nos estuvo buscando hasta las 2 de la mañana.
Miramos a todos lados a ver las cajas de la mudanza y había una tensión en el ambiente.
-Samanta -dijo Juan rompiendo el silencio -te trajimos algo Lisa y yo -apuntándose a los dos.
-Así ¿que? -mire curiosa.
-Un regalo -sacaron los regalos.
Lisa tenia una bolsa grande y bonita mientras que Juan una caja grande.
-Chicos no tenían que molestarse -dije viendo a ellos con los regalos.
-Claro que si amiga para que nos recuerdes y no nos olvides -dijo Lisa por los dos.
-Bueno lo acepto pero ustedes también aceptan esto -saque un collar y una manilla.
-¿Que es eso? -pregunto curiosa Lisa.
-Es un recuerdo el collar para ti y una manilla para Juan -yo tengo un collar también dice "amigos", el tuyo dice "por" y la manilla "siempre", si unimos las piezas se forma un corazón.
-Gracias -Juan me abrazo.
-No me dejas respirar -dije imitando asfixia.
-Lo siento -se disculpo.
Lisa río y intercambiamos miradas cómplices.
-No lo abras hasta que no llegues -me advirtieron.
-No es justo -reproche.
-Si es justo -imito Juan mi voz.
-Pareces un bobo -le pegué suavemente en el hombro.
-Hay -fingió dolor.
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Detras de esa mascara
RomanceTodas las personas podemos ver las características y cualidades de todos, pero no podemos ver sus sentimientos y pensamientos, ya sea por las apariencias o las actitudes y sobre todo el comportamiento que se tenga delante de todos o quieran dar, per...