Capítulo 10 - VERDAD

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El tiempo pasa muy rápido, a veces sabemos en que invertirlo y en otras no hacemos nada y dejamos que la vida nos pase a un lado preguntándonos ¿Pará qué demonios vine al mundo?, sera tonto lo que me pregunto a mi mismo, o es que acaso la vida viene con un libro  de instrucciones que se te entrega al nacer, en el que te dice que cosas vas a realizar hasta el día de tu muerte, como si la vida fuera tan simple.

Dígame en dónde queda la emoción, la aventura de vivir un día nuevo, de ver que te prepara el destino,¿ donde queda todo eso?, la sensación de estar  vivo es única, hasta que llegas al punto donde estár lo suficientemente preparado para hacer y traer nueva vida al mundo, o me van a decir que nunca han tenido esa sensación de saber que se siente ser papá, de tomar su manito al llegar a estar mundo.

Yo no sabía que era eso, Emilia no podía tener hijos pero eso no importaba porque el amor era algo de locos que podía superar cualquier obstáculo.

Un mes había pasado en un instante, se iba Abril y llegaba Mayo, aún tenía a mi amada a mí lado, pero tenía miedo y mucho de solo pensar en perderla, pero todo ese miedo se disipaba con solo escuchar su tiernas voz.

    - ¿ Que miras Cavil?.

    -Nada - Respondí.

    - ¿ Como que nada si estas totalmente idiotisado?.

    - Como no estarlo - dije - si el brillo de tus ojos hacen que mi mundo brille con tanta intensidad que es difícil calcular.

    - Gracias Cavil - dijo Emilia sonrojada - tan hermoso como siempre.

     - Bésame.

     - Claro que si - dijo - pero con una condición.

     - ¿ Cuál seria esa?.

     - Que me beses como si se tratase de la última vez, como si mi vida dependiera de ello - dijo - que sea tan fuerte y a la vez tan hermoso como el amor que nos tenemos.

      - Te voy a besar de tal manera que sentirás que estás en el cielo, sentirás que es eterno un beso tan largo y duradero que nada ni nadie podrá hacer que lo olvides jamás.

Emilia sonrojo, mientras se acercarse a mi.

     - Si ese beso me va llevar al cielo - dijo - entonces te voy a pedir que tu seas mi cielo y tus labios mi eterna felicidad, porque nunca te pienso dejar escapar.

Nos besamos, eran las diez de la mañana y estaba lloviendo, Emilia tenía puesta una franela mía de Aerosmith la cual le empecé a subir muy despacio hasta quitarla toda, abajo no tenía nada, solo su panti blanca, baje hasta su cuello besándola.
No pares -.

Yo seguía besando su cuello, era algo que a ella le fascinaba, hacer eso le excitaba mucho.

Pasamos casi que todo el día así juntos los dos abrazados el uno al otro mientras veíamos películas fue cuando mi teléfono sonó , yo estire mi brazo para ver que era.

    - ¿Quien es Cavil?.

    - Es Matt.

    - ¿No vas a contestar?.

    - Debería o no.

Ella me quito el teléfono y contestó.

     - Hola Matt habla Emilia - dijo muy energética.

Hablaron por un momento.

     - ¿Que era?.

     - Nos invitó a un Evento.

Hasta el último momento  ( Finalizado) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora