¿Por qué?→𝐏. 𝐉𝐈𝐌𝐈𝐍 [✓]

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Narra Jimin.

Son las tres de la madrugada y es el cumpleaños de Seo. No le mandé ningún mensaje acerca de su cumpleaños a las doce de la noche —como hacen todos—, sino que quería ir a saludarla. Mi plan era salir de casa para ir a la de ella y darle una gran sorpresa. Sé que es muy temprano, pero necesitaba verla, así que agarré las llaves del auto, salí por la ventana de mi habitación y mí puse en camino hacia su hogar.

Durante todo el camino estuve ansioso por llegar y verla. Tenía que ser los más cuidadoso para no llamar la atención de alguien y que luego terminen llamando a la policía, pensando que alguien quiere robar en la casa de los Go. Cuando estacioné el auto frente a su casa, me bajé, caminé hacía su ventana y me trepé tratando de hacer el menor ruido posible. La habitación de Seo estaba toda oscura, así que seguramente estaba durmiendo. Con el mayor cuidado, me acosté a su lado y ella despertó cuando le toque el brazo. 

—Jimin, ¿qué haces aquí? Son las tres de la mañana— murmuró, frotando su ojo izquierdo.

—Feliz cumpleaños, bebé— susurré en su oído, con Ian sonrisa.

—¿Viniste a esta hora de la madrugada sólo para decirme eso?— preguntó, con su ceño fruncido, adaptándose a la.poca luz que entraba por las ventanas gracias a los grandes postes de luz de las calles.

—Haría eso y más— dije antes de acercarme y besarla.

—Eres el mejor— sonrió cuando nos separamos, y pasó sus brazos por mí cuello.

—Además, quería despertar contigo en la mañana— comenté, abrazándola por la espalda. Ella apoyó su cabeza en mi cuello —En la mañana, me voy a tener que ir. Estoy preparando una sorpresa para ti— dije, acariciando su cabello.

—No hace falta que me hagas un regalo, con tenerte asi esta bien— mencionó, metiendo su mano bajo mi camiseta para acariciar mi estómago.

—Tengo que darte la mejor sorpresa— sonreí  —En la tarde, vendré a buscarte porque saldremos con los chicos, luego vendré a dejarte a tu casa para que te arregles y volveré a buscarte esta noche— le expliqué los planes del día. 

—Esta bien. Ahora a dormir, tengo mucho sueño— asintió, cerrando sus ojos.

(...)

Algo estaba provocando cosquillas en mí cara y no sabía que era. Abrí un ojo y me encontré con el rostro de Seo sonriendo enfrente mío.

—Hola— me saludó en un susurro.

—Feliz cumpleños, belleza— dije, sonriendo. Tiré de su brazo, pegándola a mí pecho, y la abracé —Te amo mucho, bebé— susurré, cuando nos separamos del abrazo.

—Yo te amo mucho más— respondió, sonriendo, y me besó. En la mitad de nuestro beso, sentí su sonrisa y ella sintió la mía. Sabía que estaba feliz porque hoy era su cumpleaños y me arriesgué a venir por ella.

—Hoy te tengo muchas sorpresas— comenté, corriendo un mechón de pelo atrás de su oreja.

—Sabes que no necesito nada, con estar aquí contigo, está bien— dijo, besando mi mejilla.

—Y sabes que a mi no me importa y que voy a terminar haciendo todo lo contrario— bromeé, soltando una risa.

—Esta bien— dijo. Giró sus ojos y sonrió.

—Ahora, a levantarse— la cargué como si fuese un koala y ella se colgó de mi cuello.

—¿Que haces?— preguntó ella riendo, mientra apretaba mas su agarre a mi cuello y cintura con sus piernas.

-- A las tres vendré por ti para que salgamos con los chicos, yo tendré que irme un rato antes para hacer algunas cosas. Jungkook vendrá a dejarte y, a las ocho, volveré por ti, otra vez— le expliqué —Ahora tengo que dejarte— dije, bajándola de encima mío —Te veo mas tarde— tomé mi cosas y caminé hacía la ventana de ella.

—Adiós— me saludó, abrazándome.

—Adiós. Feliz cumpleaños, amor— la besé por última vez y me fui por la ventana.

Hoy sería un dia bastante largo.

Para el día hoy, tenía un turno reservado para la peluquería, otra vez, pero esta vez me voy a teñir el pelo de rosa. Sé que a Seo le gusta ese color, y eso me tomaría unas dos horas y media.

Para cuando llegue la noche, tendría que preparar algunas cosas. Iríamos a cenar a una playa que hay cerca de aquí, esta a una hora, aproximadamente. Así que, tendré que comprar un montón de cosas para después llevarlas. Namjoon dijo que me daría una mano para llevar todo hacia el lugar.

En este mismo instante, estoy comprando cosas que faltan para la cena de esta noche. Mamá dijo que me ayudaría a hacer la comida, porque yo no tenía ninguna experiencia culinaria.

(...)

Eran las tres de la tarde y estaba yendo hacía la casa de Seo para pasar la tarde, en el río Han, donde los chicos estaban esperándonos. Yo tendría que irme antes de lo planeado porque tenía un turno reservado en la peluquería, y ellos se quedarían un rato mas.

Namjoon dijo que, luego de la salida al río Han, iría hacia la playa a la que le había nombrado con cosas para llevar, mientras yo buscaría a Seo a su casa.

Ella estaba saliendo de su casa mientras se despedía de su padre con la mano. Me bajé del auto para ir hacia donde estaban ellos y poder saludarlos. Mi novia estaba completamente hermosa. Tenía un vestido color crema, nada apretado, y llevaba puesta unas Converse blancas, su pelo suelto y, como siempre, nada de maquillaje.

—Hola— me acerqué a saludarlos con una sonrisa.

—Hola— Seo se dio vuelta para mirarme y sonrió.

—Hola, Jimin— me saludó su padre, extendiendo su mano.

—Buenas tardes, señor Go— acepté su mano.

—Bueno, vayan y cuidense— dijo el padre de Seo.

—Adiós, papá— mi novia le besó la mejilla.

—Adiós, señor— me despedí con la mano.

—Adiós, chicos— nos saludó con una sonrisa.

Seo y yo nos subimos al auto y emprendimos el camino hacía el río.

—Los chicos estan emocionados por verte, incluso Yoongi— bromeé, tomando su mano y Seo soltó una risa.

—Yo también estoy feliz por verlos— sonrió, y con su pulgar acaricio el dorso de mi mano.

En el camino, habíamos hablado y cantado las canciones que pasaban por la radio, pero a Seo no le gustó ninguna —mas allá de que más conocía todas— así que conectó su celular al bluetooth del auto y puso su playlist de música.

Dejé el auto estacionado y salí de él para abrirle la puerta a Seo. Tomé su mano y la ayudé a bajar, y caminamos juntos hacia donde se encontraban todos nuestros amigos. Tuvimos que bajar un pequeña colina y, luego, pudimos verlos.

—Hola— saludamos cuando estuvimos en frente de los chicos.

—¡Seo!— exclamó Jungkook, cuando se acercó a ella y la envolvio en sus brazo.

—Feliz cumpleaños, cariño— Jin se acercó a mí novia y la abrazó. Todos nuestros amigos se habían acercado a Seo para abrazarla y desearle un feliz cumpleaños y un lindo día.

—Yoongi, yo sé que tu quieres abrazarme— mencionó Seo con sus barzos abiertos y una sonrisa en el rostro.

—Feliz cumple, Seo— Yoongi la abrazó y le dio unas palmaditas en la espalda.

—Yo sabía que tu corazoncito no era de hielo— bromeó ella, dando una palmada en el pecho de mi amigo.