Extrañas coincidencias (Harry Styles) Terminada/Editando.

Capítulo 40: Fireproof.

Narra Adelia. 

Pensaba que en cuanto cerrase la puerta de casa, me derrumbaría en un mar de lágrimas sin consuelo. Pero vaya, creo que estoy seca. No estoy destrozada como pensé que estaría.

Estoy alegre. Las cosas entre Harry y yo están todas solucionadas y ahora podremos estar tranquilos. Es como si me hubiera quitado un peso de encima.

No quiere decir que no quiera estar con él. Nada de eso… Solo que no es el mejor momento. He aceptado esa condición únicamente porque sé que pasarán los años y yo seguiré sintiendo lo mismo o más por él.

Seguiré amando su voz grave, seguiré amando su sonrisa, su pelo, sus ojos, sus labios, sus caricias, la forma en la que me hace sentir cuando me besa. Eso será lo mejor y lo peor.

Porque odio estar lejos de sus labios, por lo que va a ser difícil. Pero lo mejor será volver a reencontrarnos y volver a probar sus labios, que espero no cambien mucho en los próximos años, y que cuando vuelva, que espero volver, no tengan dueña.

“Vamos Ade… solo son dos años. Los años en la uni se pasan volando. Y más con esa motivación, santo cielo, está bueno tu amiguito eh…” Decía Lola al otro lado del teléfono mensajeándome.

“Calla lela…” 

“Tía, como después de todo lo dejes escapar, es que te pego…” Amenazaba Patri.

Les acababa de contar todo desde que llegué aquí de nuevo y esas eran sus reacciones.

“¿Folla bien?” Estaba tardando en saltar Lola.

“Lol, tía, ¿acaso lo dudas? ¿Tú has visto esas manos y ese cuerpazo que tiene el jodío? Tiene que dar a base de bien.” Contestaba Patricia.

“Que os zurzan guarras… es mío.” Respondí.

“Lo sabemos, sólo queremos hacerte rabiar un poco”

“Apuesto lo que quieras a que hace maravillas bajo las sábanas” Decía Lola.

“Dios y su voz… tiene que gemir que da gusto.” Replica Patri.

“Estáis salidas, tío… iros a la mierda, es mío, nunca lo sabréis.” 

“Nosotras también te queremos, pero somos curiosas…”

***

Estamos en casa de los chicos Rosie, Michelle y yo esperando a que lleguen.

Hoy estrenan Fireproof. Y han ido a la BBC Radio 1 para hacer pública esta genial, maravillosa, magnifica noticia, porque todas estábamos deseando esto. Estaban todos emocionados antes de irse esta mañana. Querían que estuviéramos aquí y los esperásemos para felicitarlos cuando llegasen de nuevo.

Hemos venido a las siete y media de la mañana porque ellos se iban a las ocho. Es la una y estarán a punto de atravesar esa puerta.

No aguantaba los nervios, así que subí las escaleras y busqué la puerta de la habitación que tan bien conocía. Dejé las camisetas que Harry me había dado, no me pertenecen ya. Lo hice mientras él no está porque sé que no me dejaría hacerlo. A cambio de esas camisetas cogí una. 

Una negra de los Rolling que promocionaba el tour por América del año 1978. Una vez me dijo que le venía pequeña y estaba en el “montón de camisetas que no le caben”, cómo él mismo lo llama. Busqué en su escritorio los postits y escribí en uno.

“Te devuelvo cinco a cambio de una. Ya no la usas, no notarás que ni si quiera está. Gracias. Ade.”

La guardé en mi mochila y bajé las escaleras. Al rato ellos llegaron. Todos tenían una sonrisa enorme en su rostro. También unas buenas ojeras.