¡Soy capaz!

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Varias personas están interesadas en ti y tú:

a.Ya lo sé, ¡soy irresistible!

b.Tampoco son tantas, además no me interesan.

c.¿Eh? ¿Le gusto a alguien?

Eh bueno, es c, ella es algo densa.

El sitio era algo oscuro para su gusto y sus ojos aún no se acostumbraban, pasaba la vista por todo el lugar notando que había demasiadas personas. Miro a la persona que estaba a su lado y notó que estaba muy nerviosa. En todo el tiempo que habían estado allí no habían hablado, por lo que decidió romper el silencio. - Exactamente, ¿Por qué haces esto?

- Porque... - La rubia iba a responder, pero su acompañante se lo impidió.

- Déjame adivinar, tú no sueñas con ser una cantante famosa, solo quieres humillar a Manoban e impresionar a Rubi- Luego de una pausa en su discurso continúo. - Pero te informaré de algo, a Rubi no le importará si ganas o pierdes. Incluso si Manoban está en el último puesto y tú en el primero ella correrá a sus brazos. - Irene quiso decir algo, pero su compañera se lo impidió. - ¿Sabes por qué? Porque a Rubi quien le gusta es Manoban, no tú. - Terminó la pelirroja.

- Wendy, ¿tú también piensas eso? Yo no creo que a Rubi le guste esa engreída.

- Pues asimílalo de una buena vez... - Wendy rodó los ojos al ver la expresión de su tonta amiga. - Oh eres tan densa y estúpida. Andas detrás de una chica que ni notas que existes y encima desperdicias la oportunidad de estar con una gran chica que te quiere y que estoy segura, tú quieres también. - Dijo exaltada, ella no quería hablar sobre Seulgi, pero Irene no parecía que entraría en razón por ahora. - No sé ni porque vine, supongo que soy tú tercera opción.

- ¿Tú también con eso? ¿Ahora también te gusto a ti o qué?

- No, no me gustas, solo pienso que eres una estúpida que no notas lo evidente. Y yo de ti hago algo para recuperar a Seulgi, porque si no lo haces no solo perderás a una amiga, también a una persona que te querrá siempre incondicionalmente.

- Pero a mí no me gusta Seulgi - Comentaba exasperada. - ¿Qué quieres que haga? ¿Qué salga con ella, la ilusione y le rompa el corazón? Para mí ella solo es mi amiga.

Wendy solo quedó mirando a Irene, su amiga a veces podía ser muy densa, no sabía si reírse o llorar, ya algún día Irene se daría cuenta que siempre le ha gustado Seulgi, solo que al tenerla siempre ahí no la ha notado. Ella no era ciega, Irene siempre se ha desvivido por Seulgi, siempre la ha cuidado y ha estado al pendiente de ella, nunca ha permitido que alguien la hiera o se burle de ella, para Wendy siempre había existido química entre esas dos, solo que Irene era algo densa y Seulgi muy tímida para admitir sus sentimientos. Ante tales pensamientos no pudo evitar recordar su noche anterior.

Alguien en la puerta tocaba insistentemente por lo que se levantó de su cómoda cama y abrió la puerta de su habitación encontrando algo que le extrañó mucho, una Seulgi con los ojos muy hinchados, muy seguramente por llorar toda la tarde. - ¡¿Pero qué diablos?! - Exclamó. - ¿A ti que te pasó? - Dijo al tiempo que la dejaba entrar  a su cuarto y notando a su madre tras de ella, quien le decía con la mirada "¿Qué pasa?", ella solo negó con la cabeza y le pidió en silencio a su madre que la dejara a solas con Seulgi.

Una vez dentro del cuarto, Wendy llevó a Seulgi hasta su cama donde las lágrimas asaltaron su rostro una vez más. - L-lo arruiné Wendy - Dijo entre balbuceos. - Lo arruiné.

- ¿Qué arruinaste?

- I,Irene, me i-invitó a acompañarla a la audición. - Dijo tomando aire. - Le pregunté si había invitado a Rubi antes, ante su silencio me llene de ira y estalle.

La diva y la princesa (PAUSA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora