Capitulo 5

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Cuando por fin logré parar un taxi y finalmente pude llegar a mi casa me encontré con un paquete, lo abrí rápidamente y saque de el mis nuevos documentos de identificación.

Mi nuevo nombre era Bella Stewart, dejaron que conservará mi edad, pero mi mes y día de nacimiento eran otros, ahora se suponía que había nacido el 14 de Enero de 1990.

Y se suponía que mis padres John Stewart y Jules Mann, habían fallecido cuando era una niña de once años de edad, y mi tía-abuela Susan me crió y falleció hace cinco años.

Tenía una carrera que podía manejar y que ya estaba en mi curriculum falso.
Dentro también se encontraba mi licencia de conducir y mi identificación, y algunos otros documentos.

¡Y ya esta! Tenía una nueva identidad.
Genial...

Regrese todo dentro del paquete y camine hacia la cocina, tome una botella de agua y comencé a caminar hacia mi habitación.

Casi dejo caer la botella de agua a causa de la sorpresa.

¡Oh por Dios! ¡Alice!

Había un "par" y me refiero a unas 6 o 7 maletas, dentro de la habitación. Tenían un estampado con colores bonitos, eran muy bonitas y al parecer eran nuevas.

Camine hasta la cama y abrí la maleta más cercana, en ella se encontraba ropa, mucha mucha ropa, y en todas las demás había exactamente lo mismo, con excepción de una que tenía todas las cosas que podría - y suelo - ocupar para mí aseo personal y otras cosas nuevas para mi. Se encontraba desde mi champú favorito, hasta un nuevo cepillo de dientes.
Alice también compro muchísimos pares de zapatos, tantos que perdí la cuenta. Estos se encontraba en otra maleta y en otra había cajas, cada caja contenía algún accesorio.

Todo era hermoso pero no podía llegar a la casa de Edward con un sin fin de maletas como si me fuera a quedar una eternidad. Para Alice esto solo era lo necesario y era tan capaz de llevarme y dejarme en la entrada de esa mansión con su sin fin de maletas.

Así que mejor no provocarla, si es lo mejor.

Me sorprendió un poco encontrar una nota de Alice en la cocina, estaba escrita con su preciosa caligrafía, tenía un poco de envidia por cuan preciosa era su letra.

La mía en cambio era un desastre a causa de tener que escribir rápido.
En si, mi letra era bonita, pero en el trabajo me salía horrenda.
La nota decía lo siguiente:

Sabia que esta oportunidad se presentaría algún día.
Te voy a extrañar, como cada vez que te vas.
La ropa y todas las cosas que se encuentran en esas maletas, son un regalo sincero.
No protestes, y disfrútalas.
Te quiero.

Pd: La abuela estaría encantada de que yo gastara algo tan insignificante como lo es el dinero, en ti. Además tus padres ma han ayudado.
Renne incluso fue conmigo y escogió algunas cosas.

Cuídate. ❤️
-Alice.

Sonreí, porque se que ellos solo se preocupan por mi, y bueno también estarían encantadas de que conociera a alguien especial. Excepto Charlie. Mi maravilloso padre, si por el fuera estaría en un convento desde...

¿Desde cuándo? Oh si, desde que observo como un chico me sonreía...
¿Quién era ese chico? Bueno en realidad era un niño.

Tenia 5 años y juro que nunca lo olvidare, mis padres me habían llevado al parque y Charlie se enfurruño tan tiernamente. Qué me desternillaba de la risa cada vez que lo recordaba, tampoco es como si perdiera oportunidad de recordarle sus tiernos y arrebatadores celos, ¿qué hacía Charlie? Él siempre alega que yo soy su princesita y que él no podía permitir que los "tipejos" se aprovecharan de mi.

¿Casualidad o Destinó?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora