Bad Stepbrother || Ziam

Capítulo 14

Una semana después...
Domingo, 6:28 p.m.

Era una tarde fresca, el sol justo estaba poniéndose, brillando como una enorme bombilla blanca en el horizonte y con ello lo acompañaba el cielo en una magnífica paleta de colores naranja, algunas avesillas volaban hacia los árboles y otras tantas cantaban bajo. Estar en el parque en este momento era una gran bendición, pues todo podía apreciarse y vivirse mejor desde ahí, y esto, por supuesto, no fue pasado por alto por los bellos ojos esmeraldas que desde su posición –sentado en una manta blanca extendida sobre el césped– veía todo con adoración.

—Las mejores cosas de la vida son gratis —comentó Harry, seguido de un largo suspiro.

Louis lo había invitado para tener un picnic y, apenas terminaron de comer, el espléndido acto de la naturaleza dio inicio. Lo admiraron en un cómodo silencio hasta este momento que Styles decidió hablar.

—Lo son —afirmó Tomlinson—, como estos momentos a tu lado. No podría pedir nada mejor que esto —añadió, tomándolo de la mano y robando así toda la atención que el menor le daba a la puesta—. Tu compañía es todo lo que necesito para tener una sonrisa en mi rostro.

Harry ladeó ligeramente el rostro, mirando fijamente los orbes zafiro.
—Me gusta estar contigo —manifestó con una pequeña sonrisa—, me haces sentir bien.

—¿Qué tan bien? —cuestionó con una sonrisa de lado, acariciandole el dorso con su pulgar.

—Demasiado bien.

Su sonrisa se expandió, dejando a la vista la perfecta hilera de perlas superiores y unas tiernas areuguitas a los lados de sus ojos.
—Me alegra saberlo —admitió, acercándose un poco más a él—... Y... Umm... Hay algo —Aclaro su garganta, se estaba poniendo demasiado nervioso—... Sé que dije que iría lento, pero, todo esto que entre nosotros sucede, yo... No sé, siento una química gigantesca y una comodidad inigualable cuando estoy contigo, que no quisiera esperar más tiempo para... ya sabes —Tomó una profunda respiración y lo dejó salir—: Ugh, sabes lo mucho que me gustas, Hazz, y quisiera saber si tú ¿quieres ser mi novio?

El rizado se quedó atónito, no sabía qué decir... Bueno, en realidad sí sabía, es solo que no conseguía que las palabras salieran de su boca. Sonará muy cliché, pero sentía un intenso hormigueo en el estómago.
—¡¡Sí!! —chilló más que feliz—. Pensé que nunca lo dirías... O bueno, sí, algún día pero no tan pronto... y no es que esté mal, al contrario, está muy bien —habló rápidamente por el nerviosísmo—. Uh... Perdón, estoy divagando —dijo, soltando una risita—. Sí, sí quiero ser tu novio.

—¡Oh por Dios! —Sus ojos se abrieron enormemente, mientras se colocaba de pie y tiraba con suavidad de la mano ajena para hacer que el menor imitara su acción—. ¡Gracias, gracias, gracias! —chilló, mientras lo tomaba por la cintura y lo levantaba, dándole un par de vueltas en el aire.

Harry soltaba pequeños grititos de alegría con risas de por medio.
—¿Gracias por qué?

—Por aceptar ser mi novio —respondió con un encogimiento de hombros, colocándolo nuevamente sobre el piso—. Eres maravilloso —añadió, acariciandole suavemente la mejilla.

—Tú haces que cada momento contigo sea mágico —manifestó, bajando ligeramente la cabeza con un leve rubor en sus mejillas.

—Si quieres que este momento sea verdaderamente mágico, podemos ir por aquí —Entrelazó sus manos y lo llevó un par de metros lejos de donde estaban, llegando a una enorme fuente—. Esta fuente no es común y corriente —dijo, buscando algo en el bolsillo de su pantalón—... Es una fuente de los deseos —añadió, sacando una moneda y mostrándosela—. Deseo que tengamos una hermosa relación, que nuestro amor crezca tanto como sea posible y que nada ni nadie nos separé —pidió, para luego besar la moneda y lanzarla al agua.