Los dos gAys de Duxo y Aquino había salido a comprar provisiones, ya saben, por lo de la cuarentena y todo por ese pinche virus pendejo. Las compras estuvieron tranquilas, no había tanta gente. Ya habían comprado lo necesario y se dirigían al auto de Duxo para volver a su nido de amortz.
— Duxo, ¿tú crees que somos buenos padres? —. Preguntó Aquino.
— ¡Claro!, somos mejores amigos y eso es lo que nos hace un excelente equipo —. Habló Duxo dándole confianza al contrario mientras dejaba en el asiento del auto a la bebé—. Mírala, es feliz con nosotros, ahora puede caminar, gracias a ti :D, cada uno tiene su propia fuerza —. Hizo una pausa y luego volvió a hablar—. Ahora, ¿quienes son unos buenos padres?
— Nosotros.
— No te escucho.
— ¡Nosotros!
— No lo olvides —. Cerró la puerta del auto mientras Aquino miraba en silencio.
— ¿Acabas de encerrar a la bebé en el carro?
— ¿Pusiste las llaves en la bolsa?
— Las puse en la bolsa.
— ¡Te dije que no pusieras las llaves en la bolsa!
— No te asustes, vamos, no te asustes —. Intentó calmar a Duxo mientras veía por la ventana como Jaiden estaba tranquila—. Tranquila Jaiden, todo está bien —. Comenzó a entonar "Arroz con leche" para que la bebé no perdiera la calma.
— ¿Le estás cantando?, ¡Nos podrían arrestar por eso! —. Duxo corrió a buscar algo para romper la ventana y sacar a Jaiden de ahí, tomó un bote de basura y volvió donde el carro—. ¡VOY A ROMPERLA! —. Gritó y luego cayó al suelo.
Aquino llamaba al Nain guan guan para que pudieran ayudarlos a sacar a Jaiden.
— Asistente de emergencia... Aquino.
— Que alguien nos ayude, encerramos a nuestra hija en el auto y la gente está sospechando.
— ¡VOY A ROMPERLA!
— ¡Tú no romperás nada, le caerán cristales si lo haces!
— Sr, por favor, relaje a su esposa, todo va a estar bien.
— Es un hombre.
— ¿Enserio?
— ¡No te preocupes Jaiden, papi irá ti!
— Señor, mandamos una señal, la puerta debe estar desbloqueada ahora.
— Duxo, revisa la puerta. —. Duxo se acercó a está e intentó abrirla.
— ¡No abre! —. Y al fin la puerta logró abrirse—. Oh, eso fue asombroso, ¿cómo lo hizo?
— No lo sé, Lo hicimos, Gracias —. Aquino colgó la llamada y de la bolsa sacó las llaves.
Y así fue como Duxo y Aquino se dieron cuenta de que era un milagro que la bebé siguiera con vida.
Fin :D
jAJA amo ese vídeo uwu. Car moment osiosi
Que pedejadA lo sé.