El amor en tiempos de guerra - LeoGracia

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Altagracia 

Cuando me dieron el alta medica luego del atentado, lo primero que había hecho ese día fue ir a la estancia a interrogar a Fernanda Céspedes, no tuve ni que amenazarla para que me contara todo con lujos de detalles, ella ya sabia que si no la mataba yo la iba a matar Braulio, ella me confirmo lo que tanto temía, mi propia socia me estaba traicionando y eso no iba a quedar así. De la ascienda me fui directo a enfrentarla y de ahí nos declaramos mutuamente la guerra. al llegar a mi edificio estaba León esperándome, el hombre que me había hacho sentir una vez mas, despues de lo que paso con Saul pensé que nunca mas me volvería a enamorar hasta lo había jurado, pero llego él, para darme cuenta que aún tenia una oportunidad para ser feliz, el único problema era que es policía y aunque sabe mi pasado y todo lo que hice no se si me aceptaría  sabiendo todo lo que estoy haciendo con los familiares de los Monkys, el dice que el se va encargar de hacer justicia, pero conociendo la justicia se muy bien que nunca van a pagar si yo no hago algo, ellos merecen lo peor por matar a Monica, mi hija, y no me iba a detener. 

ya habían pasado dos días de todo eso, estaba en mi departamento por cenar con matamoros, mi gran amigo, Magdalena nos estaban sirviendo cuando tocaron la puerta

- es León - dijo Matamoros - los guaruras de abajo le dejaron pasar.

- Esta bien, Magdalena pon un plato mas en la mesa, yo abro - dije parándome, yendo a la puerta - León - sonreí y le di un corto beso, hacia dos días que le había dicho que lo amaba y eso me aterraba - espero que no hallas cenado, ven Magdalena hizo una pasta riquísima - ambos caminamos a la mesa, donde matamoros se estaba parando. - matamoros quédate

- pero doña.. - lo interrumpí

- nada de peros, eres familia, de paso a león no le molesta - me di vuelta para mirarlo 

- No claro que no - dijo león- seria interesante conocerte, nunca hablas mucho - al decir eso Magdalena se rió y se retiro a la cocina.

- que quieres saber Contreras - dijo empezando a comer 

-No lo se como se hicieron tan amigos con Altagracia. - dijo el policía 

- bueno eso es fácil, ella siempre creyó en mi, y luego cuando lo dieron por muerta por meses fuimos nosotros dos por el mundo - yo solo los miraba mientras hablaban, pensando en cada palabra de mi amigo, no quería que León sepa mucho  sobre mis años desaparecida

- interesante.. - dijo pero fue interrumpido por el timbre y luego matamoros parándose  y sacando el arma

- ¿que pasa? - pregunto León haciendo lo mismo

- toda persona que entra a este piso tiene por lo menos dos controles de mi gente, nadie puede llagar hasta la puerta sin que sea anunciado - explico, matamoros se acerca a la puertas mientras con león nos quedamos unos pasos más atrás apuntando, al abrir la puerta siento una vos conocida decir 

- enserio Matamoros me vas a dispara, ya baja esa arma - dijo para luego abrasarlo - tiempo sin verte - luego se giro hacia mi -  Altagracia, Altagracia.. -acercándose - Yo creo que el medico cuando te dio el alta te dijo hace reposo - dijo irónicamente, para esto ya todos habíamos bajados las armas -  no declararle la guerra a la hija de puta de la Felina - y luego me abrazo - traje tu postre favorito y el tuyo también matamoros 

-entonces es eso lo que tanto  hiciste que no me querías contar - dijo león, ahí nos separamos del abrazo 

- Yo.. yo.. - intente decir, pero no se me ocurría ninguna escusa buena. - yo confirme que tuvo que ver con mi atentado y..

-y en vez de avisarle a la policía o a mi decidiste ir con tus matones no?

-Ahh - dijo la mujer recién llagada - así que tu debes de ser León Contreras, el policía - dijo mirándolo de arriba a bajo - es lindo - me susurro pero todos la escucharon - un gusto Corina Saldaña, la doña habla mucho de ti - dijo sonriendo mientras yo la miraba amenazante