El chico de la falda Rosada. [Yaoi/Gay] [Editando]

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"Rompe lazos, o duerme conmigo"

Estaba ahí, aburrido, mirándolos empalagosos, dándose besos y diciéndose lo mucho que se aman, presumiendo sus anillos de casados, dándose de comer en la boca, ¿y yo? Solo vine porque pensaba que haríamos algo pero no.

-Nai quita esa cara. -Me regaña Alsy.

-Ya pero, porque pensaba que íbamos a hacer algo, no que me quedaría aquí viendo como se comen el uno al otro. -Walter agachó la mirada apenada y Alsy le dio un casto beso el los labios.

-Está bien Nai, ¿qué quieres hacer? -El antes mencionado recargo su rostro en el hombro de su esposo y me sonrió.

-Nada, olvidalo, pero si quiero saber, ¿has conseguido alguna información sobre los Evans? -Se levantó de su cómodo lugar y sonrió malicioso. -No hagas esa cara por favor, das miedo. -Walter río.

-He conseguido algo sí, gracias a unas personitas que tengo. Escuche que los Evans tienen transacciones y están depositados en una cuenta en el extranjero.

-Pero eso es algo que algunas empresas hacen, ¿no es normal?

-Quizás seria legal si es que ese dinero fuera suyo, pero no, ese dinero es robado, y están tratando de inculpar a Collins. -Abrí los ojos con sorpresa, Myler no me dijo nada sobre esto, esa niña.

-Tendré que llamar a Aaron. -Anuncié

-¿Para qué? Myler se esta encargando de eso, si podemos obtener esa cuenta tendríamos con que empatar con los Evans, tendríamos a los oficiales de lado.

-¿Para qué nos sirve eso? Apuesto y los Evans tienen a todos besándole los pies, no son tontos Alsy, si hicieron lo de las transacciones y todo lo demás, seguro tienen un papel que apele con ellos, saben jugar muy bien a su favor, y aun así si esos documentos son ilegales, seguro y la policía también lo sabe.

-Tienes razón, entonces déjame mover algunas piezas, yo me encargó de esto. -Me sonríe nuevamente y acaricia lentamente su mano en la espalda de su compañero, que este no entiende nada de lo que hablamos.

-Igual, llamare a Aaron, le pediré que me ayude a conseguir los teléfonos de los más cercanos a los Evans.

-¿Para qué? Solo ve con Katalina, seguro y ella conoce algún bar donde pidan tarjetas, seguro y ahí consigues información.

-¿De qué parte crees que éste Katalina? -Me levante de mi lugar y lo mire seriamente.

-De nuestro lado supongo.

-Enterate genio, esa mujer me odia, y si quiero obtener algo de ella deberé darle algo a cambio.

-¿Qué cosa? -Pregunta dudoso y ambos me miran preocupados.

-A mí.

Se miran entre si sin saber que hacer o decir. Estas cosas cada ves me estresan más, no sé que hacer, quisiera tener a Alisson conmigo, me haría sentir más fuerte, más seguro de mí mismo, de lo que soy capaz de hacer y de cuanto luchar, pero dudo que ella quisiera verme después de lo que paso y el escándalo que hice, fue mi culpa en primer lugar que ella decidió irse de la ciudad.

-Me tengo que ir, nos vemos luego. -Me despedí con un signo de amor y paz y salí del restaurante.

¿Ahora qué hago? Necesito apoyo emocional ahora mismo, tome mi teléfono y marque al primero que me llegó a la cabeza.

-¿Hola? -Preguntaron desde la otra linea. Me detuve frente a una banca del centro comercial y me senté agobiado.

-Hola, ¿estás ocupado? -Deslice mi mano por mi cabello frustrado.

-¿Para ti? Nunca.

-Nos vemos en el hotel Skybon, no llegues tarde. -Y corte la llamada. Maldita sea, ¿dónde está el amor por mi mismo?

Bueno sera solo esta noche, voy a divertirme un rato con Dan y luego volveré a casa, solo espero que este sentimiento de culpa se vaya pronto, me hace daño, carcome y mata mi alma cada vez más rápido, si no me deshago de esto me voy a hundir en la verdadera desesperación.

(...)

Parece que nunca llego, o al menos yo no la vi, supuestamente su avión llegaba el día de hoy a las 3:45pm, ya eran las 8:39, ¿esperaré un poco más? Quizás llega y no me encuentra, esperaré otros diez minutos, pero sólo eso.

Al pasar los diez minutos al fin me resigne, tomé mi mochila y salí del aeropuerto, ¿y si vengo a buscarla mañana? Sí, mañana vendré, hoy ya estoy muy cansada. Tomé mi teléfono para llamar un Uber, pero recibí una llamada de un número desconocido, un tanto preocupada pero alerta ante la situación respondí la llamada, debe ser algo importante supongo.

-¿Hola? -Pregunté seca.

-Detrás de ti. -Y colgó.

La sangre se me heló por completo, ¿volteare hacia atrás? ¡¿Y si es alguien malo?! ¡No, concentrate Myler! ¡Recuerda tus clases de entrenamiento y defensa personal!

Al fin que decidí, me gire lentamente y...dios mío, casi se me sale el corazón.

-Hola enana. -Saludó.

-Alisson...-Dije casi sin voz. Ella sonrió, sonrió hermosamente, ella estaba ahí, justo delante de mi. -Alisson...-Volví a decir anonadada, desconcertada y sorprendida.

-¿Cómo estás pequeña? -

Reaccione en ese instante y corrí hacia sus brazos. Ella me recibió y, juró que me derretía, era ella, en verdad era ella, su tacto, su aroma, su presencia, no cabía duda era Alisson, mí Alisson. Ella me abrazo con fuerza peinando mi cabello, y sí, estaba temblando, ella estaba temblando, dios mío, ¿por qué me siento así? ¿Por qué me haces sentir así?

-Alisson...-Rompí en llanto, ella acurrucó mi rostro entre sus manos y me hizo mirarla. Sus ojos azules, su cabello negro azulado, sus mejillas, sus labios...estaba hermosa.

-No llores mi Amor. -Abrí los ojos como platos.

Mi amor

¿Cómo esas dos palabras me hacían sentir tan hecha? Estaba feliz, no, estaba mas que feliz, esto es un sueño, si lo fuese, jamás me despertaría, me quedaría horas mirándola a ella y sólo a ella.

-Alisson...-No sabía qué decir, estaba aun en completo Shock.

-No digas nada, por favor, dame tu calor hoy y terminemos con esto.

Aún sin soltar mi cara unió nuestros labios un beso donde ella tenia el control, era brusco pero lindo, que de alguna manera me hacia sentir de ella. Yo le pertenecía, y ese beso fue como un lazó para mi, y había entendido esas palabras pero no las quería aceptar, tomaré todo lo que pueda de ti está noche así qué... Procura hacer lo mismo.