Tú eres y siempre serás la única

Los exámenes

Yotsuba: "¡¿Por qué no nos despertamos?!"

Miku: "Quedan quince minutos, esto podría salir muy mal..."

Itsuki: "¿Qué haremos sobre el desayuno?"

Nino: "¿Alguien vio mi bolsa de maquillaje?"

Ichika: "Ahh... Tanto sueño..."

Nino: "¡Alguien tráigame mi uniforme!"

Itsuki: "¡¿Qué haremos sobre el desayuno?!"

Fuutaro: "¡Chicas, ya vámonos!"

El chico suspiró, viendo como las quintillizas se correteaban por el apartamento y se arreglaban para llegar a los exámenes a tiempo. Él ya se empezaba a preocupar y bastante. Pasó una mano sobre su cabello rubio, aún no estaba acostumbrado a tenerlo de su color natural... no desde hace cinco años.

Estaba volteado, y no se dio cuenta cuando Yotsuba se empezó a quitar la pijama en medio de la sala.

Miku le dio una mirada a su hermana.

Miku: "Me voy a cambiar en mi cuarto..."

Yotsuba: "¡Oh! ¡Si es cierto!" Dijo con cara roja.

Pero Fuutaro, ni se dio cuenta. 

{¿Qué pasará si llegamos tarde? ¿Cómo se lo explicaré a su padre...?}

Por acto de un milagro, los seis terminaron de vestirse en pocos minutos, y ya habían salido del apartamento. Yotsuba se les adelantó.

Yotsuba: "¡Ustedes van demasiado lento!" Les grito, corriendo. "Me voy a ir yendo, Uesugi-san."

Fuutaro solo asintió, y volteó a ver a Miku. Se le estaba acabando el aire, no era un adolescente atlético o capaz de correr por tanto tiempo.

Fuutaro: "¿No las llevan a la escuela en carro?..." Preguntó, casi muriéndose.

Miku: "Ebata-san es el secretario de papá..." respondió Miku, parecía que le estaba dando un ataque de asma también. "Está ocupado hoy."

Ichika: "Sí, ojalá papá pudiera llevarnos todos los días," suspiro la hermana mayor con una cara algo triste. Fuutaro si se dio cuenta de esto.

Fuutaro: "Sí... ojalá..."

Pero no dijo nada al respecto, no debería entrometerse en sus vidas privadas. Solo era su tutor o tal vez... casi un amigo. Fuutaro no estaba muy seguro y no quería tener que adivinar.

Nino sacó su teléfono de su mochila y se vio por la cámara de en frente, se sorprendió con so rostro.

Nino: "Me pondré maquillaje en el baño, ¡no me pueden ver así en la escuela!"

Fuutaro: "¿De qué hablas? Ya ven a las otras cuatro con tú misma cara sin maquillaje," suspiró, ya no podía caminar. "Y te vez bien con o sin él."

Nino sintió un brinco en su ritmo cardíaco. Un brinco pequeño, pero aun así... notorio.

Fuutaro corrió para detener a Miku y a Ichika de hablar con un niño gringo que perdió a su mamá y Nino fue detrás de él, ignorando lo que ocurrió.