Charla de madrugada

444 31 31
                                    

Captain Tsubasa pertenece a Yoichi Takahashi.

Hola ¿Qué tal? En esta ocasión les traigo un oneshot cortito pero entretenido (que no lleva a ningún punto, pero bueno, uno escribe lo que se le da la gana (por desgracia se aplica también a los mangas y por eso la historia de Captain Tsubasa se volvió mediocre, pero aquí no estamos para criticarlo, para eso tenemos los libros de las chucherías)). En esta ocasión finalmente hacen su debut mis los pulgosos de la OTP: Sayaka y Eiji. Espero que les agraden.

Disfruten la lectura.

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Nankatsu, Japón.

3:00 AM.

– Tsubasa ¿Cómo se te puede ocurrir hacer una llamada a esta hora? – se quejó Genzo mientras bostezaba.

– Le prometí a Eiji que lo llamaría, y voy a cumplirlo – respondió decidido mientras realizaba la video llamada.

– ¿No quieres esperar hasta que amanezca?

– Nop, cuando amanezca él se irá a dormir – inició la llamada –. Ve a despertar a Sayaka.

– No.

– Hazlo o te dejo en abstinencia hasta que tenga tataranietos – ante aquella amenaza el pelinegro fue al cuarto de su hija para despertarla –. Siempre funciona.

Luego de unos segundos de espera se oyó ruido desde el otro lado de la pantalla.

¿Hello?

– Eiji, hijo – saludó alegre –. ¿Puedes activar el webcam? No te veo.

Se me... ¡Se me averió! – respondió entre gemidos –. Lamento eso, me golpeé el pie contra la mesa y me duele mucho.

– De acuerdo – Tsubasa no era idiota, esos gemidos definitivamente no eran de dolor, pero no preguntaría por el momento –. ¿Cómo te va con el equipo?

Muy bien, si ganamos los siguientes tres partidos nos coronaremos campeones de la Premier League – contestó entusiasmado –. Habremos quedado eliminados de la Champions y la FA Cup, pero eso no extinguirá nuestros deseos de ganar la Premier por... Eh...

– No puede ser – se golpeó la cabeza con la palma de su mano –. ¿Juegas en el Liverpool desde hace tres años y no sabes cuándo fue la última vez que ganaron?

Sí lo sé, es solo que ahora no me acuerdo – rió nerviosamente –. Por cierto ¿Cómo están las cosas allá?

– Bien, tu hermana volverá a Tokio en unos días y yo pronto escogeré a los jugadores para las eliminatorias de la Copa del Mundo – dijo –. Y sí, tú estás en la lista, así que más te vale entrenar.

Sí, sí...

– Espero que patees el balón con el mismo entusiasmo que en el Mundial de Clubes – no hubo respuesta –. ¿Puedo saber por qué reías tanto?

Eh...

– ¿Tiene que ver con el hecho de que la pelota llevaba mi nombre? – miró la pantalla filosamente.

Al menos admite que te di duro en la cancha.

– Eso sonó muy de doble sentido, y soy tu mamá – acarició el puente de su nariz.

– No hubo suerte, le desperté pero me mandó de paseo – comentó Genzo al entrar al cuarto nuevamente.

– Tu padre ya está aquí, salúdalo – ordenó.

Charla de madrugadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora