Reina de Corazones ━━ [Finalizado] 《1》

Capítulo veinticuatro: Tu otro «yo» (Borrador)

Okay, aquí me salí de las normas e hice un capítulo «especial» —se podría decir—, narrado por Doflamingo xD

Lo he dejado así porque me pareció entretenido. Espero que les guste. ❤️

Ver a esos hombres hechizados por el encanto de mi chica, de mi mujer... me hacía sentir que en realidad no podía juzgarlos o culparlos por sentir algo por ella. Aún cuando no tenían mucho tiempo de conocerla...

Maldición, inclusive yo me enamoré perdidamente de (Tn) en pocos meses.

Ella atrae por ser tan especial, distinta... Atrapa con su personalidad. Tiene un lindo corazón y es muy honesta. No hay ni una gota de ironía en sus acciones, y cuando sonríe, diablos... todo el mundo para su curso.

Esa mirada tan penetrante y cautivadora, en verdad tiene un alma noble. Aunque a veces eso me molesta un poco. Nadie en este mundo merece ver ese lado de ella, ni siquiera yo. Es tan amable y bondadosa aún cuando se molesta y está a su límite, parecería luchar contra ella misma para no lastimar a nadie.

Mi (Tn) es una humana con la belleza de un ángel... Tiene un corazón cálido para todos aquellos que se dan la oportunidad de conocerla, ese corazón es su su mayor atractivo, y en cierto modo, su peor enemigo. Mi diosa en su forma humana.

Sé bien que no la merezco, sé perfectamente que otro podría ser el indicado para ella, pero mi amor egoísta jamás me permitiría aceptar eso en voz alta delante de nadie.
Es tan fácil amarla..., no sé en qué momento le abrí mi corazón y la dejé entrar a mi vida. Ciertamente, nunca pensé que fuera posible que alguien como yo, alguien tan lleno de tinieblas, se enamorara de ese ser de Luz.
Me siento corto de palabras cuando se trata de ella. Así que no... no tengo derecho a decirles nada por caer en su hechizo tan rápido.

Hay muchas cosas rondan mi mente en este momento, cosas que sólo puedo decir dentro de mi cabeza.
No me queda más que continuar en mi papel de novio, por suerte ella es mía, pero estos buitres no parecen querer entenderlo.

—Oigan idiotas... —les digo a los inútiles que no paran de babear por mi novia—, Salud, por la mujer que amo, por esta alianza que haremos oficial cuando todos estén reunidos, y sobre todo porque ganaremos la partida y saldremos vivos de esta. —levanto mi cerveza y repentinamente todos cambian su semblante decaído, por uno más relajado.

—Aye...! —exclaman todos al levantar sus bebidas. Parecen mas animados.

Con serenidad, guío mis pasos hacia mi princesa sin que ella me note, y es que sigue divirtiéndose al bailar con sus nuevas amigas, luce tan hermosa con ese cabello blanco... La amaba con esa apariencia tan ruda que le daba su cabello castaño, pero me mata con ese nuevo color, es como si se rodeara de una luz brillante.

Las chicas me ven, le sonríen y le avisan que estoy detrás de ella. Me inclino un poco a su corta estatura porque quiero decirle algo al oído, bueno, tan sólo deseo hacerle un pequeño e inocente recordatorio.